El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó esta noche que firmará una orden ejecutiva para suspender temporalmente la inmigración a la Unión Americana.
El mandatario explicó que la firma ocurre “a la luz del ataque del enemigo invisible, así como la necesidad de proteger los trabajos de nuestros GRANDES ciudadanos estadounidenses”.
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El enemigo del que habla el presidente al parecer sería el coronavirus.
Hace menos de una semana, el Gobierno de Estados Unidos empezó a liberar a cientos de inmigrantes indocumentados que, según miembros del Congreso y grupos activistas, corren peligro de contagio del coronavirus.
La administración de Trump mantiene a casi 30 mil personas en los centros de detención de inmigrantes en todo el país.
En su gran mayoría estas personas no están acusadas ni han sido condenadas por delitos, y podrían salir bajo libertad supervisada hasta que les llegue la fecha de una audiencia en los tribunales de migración.
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El pasado 14 de abril, el subdirector interino de Seguridad Nacional (DHS), Ken Cuccinelli, dijo que las autoridades habían identificado a 693 inmigrantes detenidos y que podrían ser liberados debido a que son más vulnerables al coronavirus.
“Como una respuesta especial a esta crisis en particular” el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) instruyó a sus agentes a que evalúen la condición de ciertos detenidos “que se consideran en riesgo mayor de exposición” al virus, añadió el funcionario.
Cucinelli, quien no especificó el período en que estas liberaciones han ocurrido, dijo que la primera tanda de unas 160 personas incluyó a mayores de 60 años de edad y mujeres embarazadas.