El portero mexicano Alex Padilla tuvo que esperar casi un mes para volver a tener actividad con el Athletic de Bilbao, ingresó en el segundo tiempo del juego en el que su escuadra se impuso 3-1 al Celta de Vigo en San Mamés y, como es costumbre, cumplió con una buena actuación bajo los tres palos.

El partido inició con un gol de Gorka Guruzeta al 4’ por los locales, pero se empató al 25’ luego de que Iago Aspas hiciera efectivo un penalti que le cometió el portero del Athletic, Julen Agirrezabala, quien recibió un fuerte golpe en la acción, pero pudo terminar el primer tiempo. Guruzeta marcó el 2-1 al 39’.

Sin embargo, para la segunda parte, Agirrezabala ya no pudo regresar al terreno de juego y el cuerpo técnico no quiso arriesgar, así que decidió recurrir al mexicano Alex Padilla, quien mantuvo su arco intacto con un par de atajadas providenciales, así que Álvaro Djaló aprovechó la solvencia defensiva para poner el 3-1 al 80’.

Ahora el cuadro de Bilbao debutará en la Europa League ante la Roma el próximo jueves y deberá resolver si Agirrezabala se recupera a tiempo o Padilla tiene una oportunidad más en el arco.