Aunque con tres goles en 11 minutos y una feroz reacción se levantaba de una desventaja de dos goles, el Barcelona sufrió una increíble derrota ante el Villarreal, que ganaba 0-2, y tras el milagroso 3-3 azulgrana, marcó tres goles en los últimos minutos para ganar 3-5 al equipo de Xavi, que tuvo otra decepcionante actuación.
El Barcelona exhibió una vez más sus falencias en la zona defensiva, al padecer frente a un Villarreal que tampoco pasa por su mejor momento.
El Submarino Amarillo fue más efectivo en el primer tiempo y luego de que le anularan el primer gol por fuera de lugar y se fue al descanso con la ventaja gracias al golazo de Gerard Moreno en el minuto 41.
Xavi buscó que su equipo reaccionara y envió tres cambios para el segundo tiempo, con el ingreso de Cubarsi, Pedri y Cancelo, pero el portugués cometió un increíble error en el minuto 54 al no poder despejar un balón y dejó escapar a Ilias Akhomach, quien se deshizo del portero Peña y puso otro clavo en el ‘ataúd’ de Xavi, cada vez con menos crédito para seguir al frente del Barcelona.
Un 0-2 con fuerte aroma a crisis, ya que el Villarreal no es el gran Submarino Amarillo de otras épocas.
LOCURA
La esperanza resurgió para el Barcelona con un gol de Gündogan en el minuto 60, con lo que restaba media hora para pelear por ‘salvar’ a Xavi con un empate que al menos evitara otra humillación tras la eliminación de la Copa del Rey ante el Athletic.
Parecía que no le daría tiempo, pero el Barcelona logró levantarse y firmó una espectacular remontada en tres minutos, con un de Pedri (68) y un autogol de Eric Bailly (71) que devolvió el alma al cuerpo de Xavi, que igual será cuestionado por la mala actuación de su equipo.
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Cuando parecía que el Barcelona se iba con el triunfo y la remontada, Gonçalo Guedes firmó un vertiginoso contragolpe y puso el empate 3-3 para el Villarreal.
Y eso no fue todo. El cierre del partido fue una locura absoluta: Alexander Sørloth anotó el cuarto gol del Villarreal en el minuto 99 y José Luis Morales hizo el quinto y definitivo, para un escandaloso 3-5 frente a un decepcionante Barcelona.
