Foto: Especial
Por Marco Antonio Duarte / Corresponsal
Michoacán.- Un enfrentamiento a balazos provocó la captura de un total de 16 presuntos sicarios en el municipio michoacano de La Huacana, zona en disputa entre al menos tres cárteles del narcotráfico.
En los últimos cuatro días, suman ya 25 supuestos sicarios capturados en La Huacana, donde mantiene su principal bastión el Cártel de Zicuirán, que encabeza Miguel Ángel Gallegos Godoy “El Migueladas”, socio del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
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La Guardia Civil (policía estatal) confirmó que la captura de estos 16 supuestos sicarios se registró este martes tras un enfrentamiento a balazos en el poblado de Los Olivos, en la región de Tierra Caliente de Michoacán.
Los ahora detenidos presuntamente atacaron un convoy de soldados y policías que forman parte de una Base de Operaciones Interinstitucionales (BOI), quienes les decomisaron 15 rifles de asalto, pistolas, cartuchos útiles y vehículos con reporte de robo.
Los detenidos fueron trasladados a la Fiscalía General de la República (FGR), en la ciudad de Morelia, capital de Michoacán, bajo un fuerte operativo policial-militar que sorprendió a automovilistas que circulaban por la autopista Siglo XXI (Lázaro Cárdenas-Morelia).
Una fuente de la 43 Zona Militar, con sede en Apatzingán, confirmó que los 16 detenidos forman parte de una célula al servicio de “El Migueladas”, quien también es identificado como un prominente productor de melón en la Huacana.
El Cártel de Zicuirán enfrenta una disputa con las organizaciones criminales de Los Caballeros Templarios y Cárteles Unidos (Los Viagras-Blancos de Troya), por el control de actividades ilícitas como la producción de droga sintética y extorsiones a productores de limón y comerciantes.
Adrián López Solís, fiscal de Michoacán, informó que de enero a octubre de este año se han registrado mil 220 homicidios violentos, en su mayoría relacionados con el crimen organizado.
Sin embargo, activistas han denunciado que los homicidios no pueden ser contabilizados de forma real, toda vez que no hay un registro confiable de personas desaparecidas y de fosas clandestinas.
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