Por Enrique Pons Franco
Según un reporte de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), durante el 2022 se realizaron en México 959 millones 653 mil 376 solicitudes de compras por medio de tarjetas de crédito o débito utilizando medios de comercio electrónico, lo que indica que la mesa está servida para que los ciberdelincuentes tengan un gran “mercado” para poder cometer sus ilícitos.
La propia Condusef señala que este tipo de fraudes financieros en México se ha incrementado de manera importante, de tal forma que del año 2011 al 2018 se han registrado 30.8 millones de reclamaciones imputables a un posible fraude, en tanto en el primer semestre de 2018 se registraron 3.5 millones por un monto de 9 mil 231 millones de pesos, y de este total, el 59% corresponden a fraudes cibernéticos.
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Aunque en el portal de Internet de la dependencia federal no se encontraron estadísticas actualizadas, de acuerdo con un informe publicado por la empresa de ciberseguridad Kaspersky en 2020, México es uno de los países de Latinoamérica con el mayor número de detecciones de intentos de phishing. El informe señala que los ataques de ese tipo aumentaron un 115% en México en 2019 en comparación con el año anterior.
De igual forma, no obstante la inexistencia de estadísticas oficiales en México sobre los segmentos de edades o sexos más propensos a ser víctimas de este tipo de fraudes, el citado informe publicado por Kaspersky refiere que en Latinoamérica, los jóvenes de entre 18 y 24 años son los más propensos a ser víctimas de fraude en línea. Según el informe, el 68% de los jóvenes encuestados habían experimentado algún tipo de fraude en línea en los 12 meses anteriores.
Por otro lado, un estudio de la empresa de seguridad Norton, realizado en 2021, reveló que los adultos jóvenes de entre 25 y 39 años son los más propensos a caer en trampas de phishing. El estudio también encontró que las personas mayores de 60 años son menos propensas a caer en este tipo de trampas, pero que, cuando lo hacen, tienden a perder más dinero que los jóvenes.
Existen varios tipos de fraudes cibernéticos que pueden afectar a los usuarios de los servicios financieros. Algunos de los más comunes son:
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• Phishing: El phishing es un tipo de fraude que se utiliza para obtener información personal y financiera de los usuarios, como contraseñas y números de tarjetas de crédito. Se realiza mediante correos electrónicos, mensajes de texto o llamadas telefónicas que parecen legítimos, pero que en realidad son falsos y están diseñados para engañar a las personas para que proporcionen información confidencial;
• Malware: El malware es un software malicioso que se instala en los dispositivos de los usuarios sin su conocimiento o consentimiento, y que puede ser utilizado para robar información personal, controlar los dispositivos de los usuarios, o incluso extorsionarlos;
• Fraude de pago en línea: El fraude de pago en línea ocurre cuando un usuario realiza una compra en línea utilizando una tarjeta de crédito o débito, pero luego descubre que se han hecho cargos no autorizados en su cuenta. Este tipo de fraude puede ocurrir cuando los detalles de la tarjeta de crédito son robados o cuando se utilizan sitios web falsos para hacer compras;
• Estafas de soporte técnico: Las estafas de soporte técnico implican engañar a los usuarios para que crean que tienen problemas con sus dispositivos y que necesitan ayuda de un técnico. Los estafadores suelen utilizar mensajes emergentes falsos o llamar a los usuarios por teléfono para ofrecer servicios de soporte técnico que en realidad no necesitan; yLee también: Bancos y call centers de cobranza en la mira del Poder Judicial: deben pagar daños morales
• Ciberacoso: El ciberacoso es un tipo de fraude que implica intimidar, acosar o amenazar a otros usuarios en línea. Esto puede incluir difundir información personal, publicar comentarios ofensivos en las redes sociales, o enviar mensajes ofensivos por correo electrónico o mensajes de texto, dado que se obtienen datos, videos o fotografías íntimas de la víctima.Para protegerse de los fraudes cibernéticos, es importante tomar medidas preventivas. En primer lugar, es crucial ser consciente de los riesgos y estar alerta ante cualquier correo electrónico o mensaje de texto que parezca sospechoso. También es fundamental tener contraseñas seguras y cambiarlas regularmente, así como utilizar herramientas de seguridad como antivirus y firewalls.
Además, es importante mantener los sistemas y programas actualizados, ya que las actualizaciones suelen incluir parches de seguridad para vulnerabilidades conocidas. Es importante también desconfiar de las ofertas demasiado buenas para ser verdad, puesto que los delincuentes utilizan a menudo la promesa de productos o servicios gratuitos para engañar a las víctimas.
De igual forma, si eres víctima de un fraude en tus cuentas bancarias, es importante tomar acciones legales en contra de los delincuentes, pero también, en contra de las instituciones bancarias, pues desde mi experiencia en el sector legal, tengo evidencia suficiente que me lleva a sostener que algunos bancos, no cumplen con toda la regulación de seguridad que les impone la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, lo que brinda elementos para iniciar también acciones en contra de estos.
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En conclusión, los fraudes cibernéticos son una amenaza importante en México y en todo el mundo. Con la creciente digitalización de la sociedad, es probable que estos fraudes sigan aumentando en número y sofisticación. Es fundamental estar alerta y tomar medidas preventivas para protegerse de estos delitos.
Así, en espera que te sea útil esta información, nos leemos la próxima semana. Mientras tanto, te espero en Twitter como @enrique_pons.
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