Por fin. En su quinto partido en la Serie A de Italia y luego de sufrir dos goleadas, el portero mexicano Guillermo Ochoa pudo celebrar un triunfo con el Salernitana y fue 1-2 de visitante frente al Lecce.
En menos de 20 minutos, el Salernitana había encaminado uno de los duelos más igualados de la zona media y que, además, supuso la primera victoria del técnico italiano Nicola Davide en su segunda etapa como entrenador de los granotas tras ser readmitido dos días después de su destitución.
Abrió el marcador el senegalés Boulaye Dia, que con una gran volea desde la frontal del área sumó su séptimo gol de la temporada, en la que está siendo muy importante para el ataque de los de Salerno, que por primera vez en su historia disputan la Serie A sin ser un recién ascendido.
Poco después, en el 19, el neerlandés Tonny Vilhena hizo buena la asistencia de Boulaye Dia, muy activo y perfectamente adaptado al futbol italiano, que filtró con calidad para su compañero en lo que parecía una noche plácida para los visitantes.
Nada más lejos de la realidad. El Lecce reaccionó al momento y, en el minuto 23, con un gol del brasileño Gabriel Strefezza, reabrió una contienda que, sin embargo, pese a la cantidad de ocasiones de ambos combinados, se mantuvo inerte en el marcador.
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Le bastó al Salernitana con encontrar una pequeña grieta en los primeros minutos para retomar la senda de la victoria tras dos derrotas y asaltar la décimo cuarta posición de la tabla con 21 puntos, uno más que un Lecce que se queda décimo quinto y que suma su segunda derrota consecutiva.
El guardameta mexicano Memo Ochoa cumplió con una buena actuación y en su quinto encuentro en Italia ya conoce lo que es la victoria. Se había llevado dos goleadas, ante el Milan y el escandaloso 8-2 del Atalanta, otra derrota frente al Napoli, además de un empate frente al Torino.
