Una clínica para atender a sus heridos o la renta de casas para resguardo son dos ejemplos de los negocios que los grupos criminales operan en México, de acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Entre los cientos de reportes y fichas revisadas por Latinus a los correos hackeados al Ejército por el grupo “Guacamaya”, un reporte de la Sedena destaca que en Celaya, Guanajuato, una clínica atiende de forma privada a los integrantes de una organización criminal sin que los médicos informen a las autoridades sobre los heridos por arma de fuego, por ejemplo.
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El reporte militar indica que la madre de Fernando Juárez Morelos “El Panther”, uno de los exoperadores del Cártel de Santa Rosa de Lima, es propietaria del hospital en la que coordina la atención médica de integrantes de esa organización criminal.
La finalidad de la clínica es controlar el ingreso y egreso de pacientes “sin poner en conocimiento de la autoridad, las lesiones causadas por armas de fuego, esperando instrucciones en caso de fallecimiento, para el manejo del cuerpo”, dice el documento.
La Sedena refiere que la clínica opera con al menos cinco médicos y podría haber sido clausurada por irregularidades sanitarias, pero han detectado que sigue operando.
“El Panther” fue el sucesor de José Antonio Yépez “El Marro”, líder del Cártel de Santa Rosa de Lima. Ambos fueron detenidos en 2021 y en 2020, respectivamente, de acuerdo con la Fiscalía General del Estado de Guanajuato.
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Otro de los negocios de la delincuencia organizada reportados es un restaurante que sería propiedad del papá del líder de la Familia Michoacana, José Alfredo Hurtado Olascoaga, alias “El Fresa”, indica un documento entregado a la Sedena por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.
La comida es un negocio atractivo para los grupos delictivos. De acuerdo con una persona allegada a José Luis Vega Sandoval, conocido como “Hermoso”, el presunto narcotraficante que tiene operaciones en el sur de México y Centroamérica, estaba interesado en rentar un local para abrir una taquería en el Estado de Morelos.
La renta de inmuebles para el resguardo criminal también está detectada por la Sedena. Por ejemplo, Euler Rubalcavar Colorado “Rayo”, a quien los militares identifican como un líder del Cártel Jalisco Nueva Generación, es acusado de extorsión, de cooptar autoridades y de alquilar casas para su grupo delictivo.
Los reportes de la Sedena revisados se centran en las actividades delictivas, las áreas de influencia y los vínculos de los integrantes de la delincuencia organizada, la mayoría carecen de información sobre las empresas de las que puedan ser propietarios o utilicen para delinquir.
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De hecho, en uno de los documentos hackeados, el general Álvaro Javier Juárez Vázquez, jefe del Estado Mayor de la 24 Zona militar, recomendó robustecer y ampliar la colaboración entre la Sedena y el Servicio de Administración Tributaria para fortalecer los operativos de inteligencia contra el lavado de dinero.
Juárez Vázquez considera que el lavado de dinero es una amenaza significativa a la seguridad y desarrollo del país.
