El secretario de Gobernación, Adán Augusto López, se reunió este jueves con los magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), para comprometerse a fortalecer a las instituciones electorales del país.
El encargado de la política interior del país acudió a la sede del TEPJF para sostener el diálogo institucional con los magistrados Reyes Rodríguez Mondragón, Mónica Soto Fregoso, Janine Otálora Malassis, Felipe Fuentes Barrera, Felipe de la Mata Pizaña, Indalfer Infante Gonzales y José Luis Vargas Valdez.
La reunión se da semanas después de que el TEPJF viviera una crisis institucional por los cambios en su presidencia. En septiembre pasado, Rodríguez Mondragón fue designado presidente de ese organismo tras varios movimientos en la cúpula, donde originalmente estaba José Luis Vargas Valdez.
La inestabilidad al interior del TEPJF llevó al presidente Andrés Manuel López Obrador a decir que el Tribunal Electoral vive una crisis y una descomposición, por lo que urgió de nueva cuenta a reformar tanto al TEPJF como al Instituto Nacional Electoral (INE).
Durante el encuentro entre el secretario de Gobernación y el TEPJF, también se reconoció la posibilidad de colaborar y mantener un apego irrestricto a la división de poderes. A su vez, se refrendó el compromiso para que, en el marco de las atribuciones propias de cada institución, se trabaje en favor de la confianza ciudadana en las instituciones electorales.
Tras ser nombrado presidente del Tribunal Electoral, el magistrado Rodríguez Mondragón declaró que “es la hora de apagar cualquier atisbo de influencias externas”, en referencia a la necesidad de que la institución que preside necesita de independencia y autonomía para cumplir sus funciones.
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“Esta es la hora de apagar cualquier atisbo de influencias externas o presiones de poderes fácticos para fortalecer la credibilidad y confiabilidad de sus decisiones”, explicó el magistrado, quien admitió que el órgano vive “momentos críticos”.
Rodríguez Mondragón mencionó que, tras su designación al frente del TEPJF, es “la hora de afianzar la imparcialidad y la autonomía del órgano, para fortalecerlo como un auténtico tribunal de derecho”.
