El subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas, acordó este lunes en reunión con la titular de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Esmeralda Arosemena de Troitiño, dar continuidad a los trabajos del Grupo Interdisciplinario de Expertos y Expertas Independientes (GIEI) en el caso de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Encinas, en su calidad de titular de la Comisión Presidencial para el caso Ayotzinapa, resaltó que el compromiso del presidente Andrés Manuel López Obrador con los familiares de los 43 jóvenes desaparecidos es mantener la participación del GIEI durante este proceso y hasta que se tengan resultados.
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El subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación (Segob) apuntó también que es necesario el fortalecimiento técnico con personal altamente especializado en materia de desaparición forzada, tortura y derecho penal, a fin de esclarecer el caso.
Durante la reunión sobre el Mecanismo Especial de Seguimiento del Asunto Ayotzinapa, Encinas reconoció la voluntad del gobierno federal para búsqueda de estudiantes desaparecidos y la atención a víctimas del caso, y ratificó su compromiso para coadyuvar en esta nueva fase del proceso de investigación.
En mayo de 2020, el gobierno de México y la CIDH firmaron un acuerdo para reinstalar el GIEI para prestar asistencia técnica en la investigación de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014.
La reinstalación del grupo interdisciplinario se dio luego de que el 3 de diciembre del 2019 los padres de los 43 normalistas solicitaran a la CIDH ponerse a disposición del Estado mexicano para colaborar en el caso.
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En el acuerdo se estableció que los expertos que formaron parte del GIEI –disuelto en 2016– volverán a integrarse al grupo, a petición de las madres y los padres de los estudiantes desaparecidos.
La muerte de Mario Casarrubias, uno de los testigos clave para dar con el paradero de 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, es un “golpe terrible” que podría afectar la investigación, dijeron a Reuters el padre de una de las víctimas y una investigadora de la CIDH.
El gobierno de México informó que Casarrubias murió el pasado 26 de julio a causa de la Covid-19. El fallecido era líder del cártel Guerreros Unidos en Guerrero, donde los normalistas fueron atacados por policías vinculados con delincuentes.
“Es un golpe terrible para la investigación, desafortunadamente él (Casarrubias) se llevó muchas cosas que sabía”, aseguró Mario González, padre de uno de los jóvenes desaparecidos.
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Ángela Buitrago, investigadora del GIEI, refirió que la muerte de Casarrubias afecta a las indagatorias del caso, pero que “hay que continuar” con la investigación.
