Hoy reflexionaré sobre la vacunación contra Covid-19 mientras México pasa por una nueva ola de la Covid-19 (ya no sé en cuál versión vamos, si en la tercera, cuarta, quinta o sexta ola), y según los reportes oficiales, más de 90% de las personas adultas hospitalizadas no está inoculada. Además, teniendo una política nacional de vacunación aprobada por el gobierno federal en la que, al corte de abril pasado, se han gastado casi 16 mil millones de pesos que los contribuyentes -o sea, tú y yo- pagamos.
Debes tener muy claro que en México, la Ley General de Salud señala en su artículo 139, fracción III, que los particulares nos encontramos obligados a aplicarnos vacunas contra infecciones del aparato respiratorio. Sin lugar a duda la Covid-19 es una de ellas.
La misma LGS establece (artículo 144) que la vacunación contra enfermedades transmisibles es obligatoria. Incluso, la inoculación es considerada como una medida de seguridad sanitaria y para casos como la Covid-19, la ley establece (artículo 408) que las autoridades deben ordenar la vacunación de personas como medida de seguridad.
¿Qué te puede pasar si te opones a vacunarte? Conforme a la Ley General de Salud, las sanciones van desde una amonestación, pasando por una multa y un arresto de hasta 36 horas. Pero cuidado, la multa por oponerse a que la autoridad sanitaria aplique dosis a la población, o en su caso, negarse a que te la apliquen, puede costarte casi 3 millones de pesos (artículo 422). Dicho de otra forma, no puedes andar jugándole al creativo y promoviendo que la gente no se vacune.
Todo ello tiene por supuesto un sentido lógico. Si una persona dice que por motivos religiosos o personales no se va a vacunar -seguramente conoces a alguien que ya te dijo que no va a querer ponerse la vacuna contra el Covid-19– no solamente se está poniendo en riesgo a ella misma, sino que además nos pondrá en riesgo a todas y todos. Allí es cuando el gobierno tiene la obligación de protegernos, no puede ser flexible y dejarlo a la conciencia o libre elección de la población, pues de otra forma, se corre el riesgo de jamás erradicar una enfermedad tan altamente transmisible como la que nos tocó enfrentar.
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Para tu tranquilidad es importante que tengas en cuenta, que en virtud que el gobierno federal ha estipulado que solamente por su conducto se comprarán, distribuirán y aplicarán las vacunas contra Covid-19, tienes en términos de la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública, derecho a saber y conocer datos tan relevantes como los lotes, los fabricantes, estados físico, o el responsable de la cadena de distribución, entre otros.
Lo dije hace unos meses, y lo repito ahora, la medida y la aplicación de las leyes puede generar polémica, pero debemos recordar que el bien común siempre está por encima del particular, más en estos casos, donde la vida de millones está en riesgo, así que por favor, ¡vacúnate carajo!
Te espero en twitter como @enrique_pons y en Facebook como Enrique Pons Franco. Nos leemos la próxima semana.
PD. No te pierdas este domingo mi colaboración en #LaBellayLaBestia #Podcast, junto a la talentosa @JulietteDays, y mejor productor de radio de México, @ElNuevoOficial, en donde además de reírte un buen rato, podrás darte cuenta que el derecho es menos complicado de lo que parece.
