Los clavados siguen dando la cara por México en los Juegos Olímpicos. El bronce de Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez en los sincronizados desde la plataforma de 10 metros es la medalla número 15 de las 71 que suma México en la historia de la justa veraniega.
Por cuartos Juegos Olímpicos consecutivos los clavados han otorgado medalla para el país, es una disciplina que no falla, de constante esperanza y de buenos resultados.
En Río de Janeiro, Germán Sánchez consiguió la plata desde la plataforma de 10 metros. Cuatro años antes en Londres 2012, se obtuvieron tres preseas.
Los sincronizados en la plataforma dieron dos preseas plateadas en ambas ramas, Iván García y Germán Sánchez en los hombres y Paola Espinoza y Alejandra Orozco en las mujeres. La otra medalla la ganó Laura Sánchez en el trampolín.
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Paola Espinosa y Tatiana Ortiz se colgaron el bronce en Beijing 2008 también en los sincronizados desde la plataforma. En Sídney 2000 fue Fernando Platas el que ganó la plata en el trampolín.
Jesús Mena obtuvo el bronce en Seul 1988 en la plataforma y ocho años atrás en Moscú 1980, Carlos Girón ganó otro bronce desde el trampolín.
Álvaro Gaxiola también se suma a los medallistas con su plata en la plataforma en México 1968, al igual que Juan Botella, que ganó el bronce en Roma 1960.
CAPILLA DEJÓ ESCUELA
El gran impulsor de este deporte para México fue Joaquín Capilla, quien ganó cuatro medallas olímpicas, bronce en Londres 1948 en la plataforma; plata en Helsinki 1952 en la misma prueba y oro en Melbourne 1956, donde además consiguió el bronce en el trampolín.
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