Francisco García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, hizo un llamado este sábado a que el gobierno federal no manipule las acusaciones en el caso de desafuero que existe en su contra.
“Es inaceptable que se pretenda violentar el estado de derecho y sobre todo violentar nuestra Constitución”, indicó el mandatario en un evento en el Centro de Convenciones en Reynosa.
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García Cabeza de Vaca señaló que Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), “manipuló” la información que presentó al comparecer ante la Sección Instructora de la Cámara de Diputados, que lleva su proceso de desafuero por solicitud de la Fiscalía General de la República (FGR).
La fiscalía investiga al gobernador panista por delincuencia organizada, lavado de dinero y defraudación fiscal.
“Elevemos la política al nivel del pueblo, pero sobre todo, evitemos ensuciarla con las manipulaciones que se están llevando a cabo con fines políticos electorales”, expresó Francisco García Cabeza de Vaca.
Al comparecer ante la Sección Instructora, el pasado 19 de marzo, Santiago Nieto acusó que se había identificado una irregularidad en la construcción del Centro de Justicia para las Mujeres en Tamaulipas. La obra había recibido un presupuesto de 66 millones de pesos, pero sólo se tenía un 9% de avance en la construcción, según la UIF.
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En su mensaje de este sábado, García Cabeza de Vaca destacó que la edificación del Centro Integral de Justicia para las Mujeres al que se refirió Nieto atenderá a las mujeres de Reynosa.
Ante la Sección Instructora, Nieto explicó que la UIF detectó la compra y venta de un departamento el gobernador de Tamaulipas en Santa Fe, una de las zonas de mayor plusvalía de la Ciudad de México, por 42 millones de pesos, además de la compra de un rancho en Soto La Marina, Tamaulipas, cuyo valor se estima en 38 millones de pesos.
El funcionario dijo que, presuntamente, se adquirió a partir de una empresa fantasma vinculada con un socio de García Cabeza de Vaca. La lista que presentó incluye una serie de propiedades en Reynosa, Tamaulipas, y McAllen, Texas.
