Rusia utilizó cuentas digitales en México, Nigeria y Ghana como parte de una estrategia para tratar de interferir en el resultado de la elección presidencial de 2020 en Estados Unidos, según un informe elaborado por los servicios estadounidenses de inteligencia.
De acuerdo con el reporte, a través del llamado Proyecto Lakhta y su Laktha Internet Research (LIR), actores relacionados con el gobierno ruso crearon “granjas de trolls temporales que utilizaron cuentas de ciudadanos de países tercermundistas como Ghana, México y Nigeria, quienes no tenían conocimiento de esta operación”.
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De acuerdo con el informe de las agencias de inteligencia, el LIR utilizó cuentas personales y sitios web en esos países y en EU, sin que los propietarios fueran conscientes de ello, para difundir narrativas en contra de Joe Biden, su familia y el Partido Demócrata.
Los medios estatales rusos, los trolls y las cuentas digitales controladas por la inteligencia rusa publicaron historias despectivas sobre el presidente Biden, como aquellas relacionadas con la supuesta adicción a las drogas y al alcohol de su hijo, Hunter Biden.
“Estos actores de influencia buscaron con frecuencia a cuentas estadounidenses para aumentar su alcance en las audiencias de ese país. Además del contenido relacionado con las elecciones, también promovieron narrativas de conspiración sobre la pandemia de Covid-19, hicieron acusaciones de censura en las redes sociales y destacaron la polarización social de Estados Unidos en torno a las protestas sobre justicia racial”, indica la investigación.
Los rusos también utilizaron sus “granjas de trolls” para difundir declaraciones del expresidente Donald Trump, así como sus acusaciones de fraude en las elecciones de 2020, las campañas presidenciales, los debates públicos, los juicios políticos y, a medida que se acercaban los comicios, las crisis internas de Estados Unidos.
“LIR, que probablemente recibió tareas y dirección estratégica del Kremlin, promovió historias que apoyaron al ex presidente Trump y denigraron al presidente Biden después de que se convirtió en el virtual nominado en abril”, detalla el informe.
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En ocasiones, además “intentaron disuadir a las audiencias de izquierda de participar en las votaciones, sugiriendo que ninguno de los candidatos era una buena opción”.
Además, apunta el documento, la inteligencia rusa hizo una doble jugada, ya que además de promover a Donald Trump, también lo criticó cuando su política exterior generaba polémicas o hasta crisis diplomáticas.
El Departamento de Justicia (DOJ) y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos, informaron este martes que Rusia, Irán y China intentaron influir en las elecciones de noviembre de 2020; pese a ello, descartaron que dichas naciones hayan logrado manipular los resultados de los comicios.
Según un informe de inteligencia difundido este martes, actores afiliados al gobierno ruso, chino e iraní impactaron la seguridad de ciertas redes durante las elecciones, sin embargo, esto no afectó la integridad de los datos de los votantes ni las maquinas para efectuar el voto.
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“Los Departamentos investigaron múltiples afirmaciones públicas de que uno o más gobiernos extranjeros poseían, dirigían o controlaban la infraestructura electoral utilizada en las elecciones federales de 2020; implementó un esquema para manipular la infraestructura electoral; o conteos de votos modificados o manipulados de otra manera. Los Departamentos encontraron que esas afirmaciones no eran creíbles”, añadieron.
El reporte indica que, en la mayoría de los casos, no está claro si los actores vinculados a gobiernos extranjeros buscaron acceder al sistema electoral con intereses más amplios de política exterior u operaciones específicas.
“Varios de estos actores recopilaron información que podrían haber publicado para influir pero finalmente no vimos ninguno de esos materiales desplegados, modificados o destruidos”, expone.
