AP .- Sin dar mayores explicaciones al respecto, Rusia llamó a consultas a Anatoly Antonov, su embajador en Estados Unidos, informó hoy el Ministerio Relaciones Exteriores de Rusia.
El llamado a consultas se da poco después de que se publicó un informe confidencial de los servicios de inteligencia de Estados Unidos, según el cual Rusia interfirió en las elecciones presidenciales de noviembre pasado en Estados Unidos, con el objetivo de ayudar al entonces mandatario Donald Trump a conseguir la reelección.
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La decisión de llamar a consultas al embajador Antonov también sucede en un momento de tensiones políticas entre ambos países, pues el presidente estadounidense Joe Biden impuso sanciones a Rusia en repuesta al envenenamiento de Alexei Navalny, líder opositor al presidente ruso Vladimir Putin, y quien está preso en la IK-2, una de las cárceles más estrictas del territorio ruso.
En una entrevista transmitida por televisión este miércoles, se le preguntó a Biden si pensaba que Putin era un asesino, a lo que respondió: “Sí, lo creo”.
“(Putin) pagará el precio”, expresó Biden en relación al reporte desclasificado.
Maria Zakharova, vocera de la cancillería rusa, no dio una razón específica para la llamada a consultas, pero ratificó que las relaciones “están en una etapa difícil y Estados Unidos las ha llevado a un callejón sin salida en años recientes”.
“Estamos interesados en evitar que el deterioro llegue a un punto irreversible, si los estadounidenses están conscientes de los riesgos pertinentes”, afirmó la vocera.
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La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo esta mañana: “Seremos directos, hablaremos sobre las áreas en las que tenemos preocupaciones, y ciertamente lo será, como dijo anoche el presidente: los rusos serán responsables de las acciones que han tomado”.
Sin embargo, esta no es la única ocasión en que se ha comprobado la injerencia de Rusia en los asuntos de Estados Unidos. Las agencias de inteligencia estadounidenses y el exfiscal especial, Robert Mueller, concluyeron hace algunos años que el gobierno de Vladimir Putin también interfirió en las elecciones de 2016 para impulsar la candidatura de Donald Trump, con una campaña de propaganda destinada a perjudicar a su opositora demócrata, Hilary Clinton.
