El Sindicato Nacional de la Patrulla Fronteriza (NBPC), en Laredo, Texas, confirmó este jueves que un supervisor de la unidad canina K9 de la corporación en el Sector de Laredo dio positivo por COVID-19.
Este sería el primer caso confirmado de un agente de la Patrulla Fronteriza infectado con el coronavirus.
A través de un mensaje en Facebook, Héctor Garza, presidente del Sector de Laredo del NBPC, dijo que el agente ya se encuentra en cuarentena.
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Previamente, el sindicato ya había informado a sus oficiales que la esposa del agente en cuestión había dado positivo por COVID-19 al principio de esta semana.
El supervisor realizó un entrenamiento con otros oficiales el pasado 23 de marzo en la Estación del Norte en Laredo. Ahí, el agente tuvo contacto cercano con un “cuantioso número” de agentes de la unidad canina y posiblemente otros agentes que trabajan en esa estación.
CNN reportó que por lo menos 15 agentes han sido enviados a sus hogares como medida preventiva.
A todos los agentes que tuvieron contacto “directo o indirecto” con el supervisor se les otorgará permiso para permanecer en sus hogares mientras están en cuarentena.
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Por su parte, en declaraciones enviadas a EFE, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) dijo que la máxima prioridad de la agencia es garantizar la salud y la seguridad del pueblo estadounidense y de su fuerza laboral.
“CBP ha emitido una guía para todos nuestros empleados que describe el uso integral actual del equipo de protección personal. Estamos tomando todas las precauciones para mantener nuestra fuerza de trabajo segura”, finalizó la agencia.
