Por Isabella González
En plena crisis migratoria, el titular del Instituto Nacional de Migración, Francisco Garduño, regaló arcones con chocolates de la Finca Rocío, propiedad de los hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante la Tercera Conferencia Nacional de Migración, el encargado de la migración en el país regaló una caja edición especial por el 16 de septiembre de Chocolates Rocío a los 26 ponentes del congreso que se lleva a cabo en la Ciudad de México.
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En tanto enfrenta una averiguación previa por la muerte de 40 migrantes, el funcionario público, además de los chocolates fabricados por la empresa de los hijos del mandatario federal, incluyó en la caja una botella de mezcal de la marca Creyente, propiedad de José Cuervo.
El evento, que se realiza en el Centro Cultural Tlatelolco del 20 al 22 de septiembre, se lleva a cabo al mismo tiempo que cientos de miles de migrantes que intentan llegar a Estados Unidos se encuentran varados en diversas zonas del país una vez que se han suspendido las corridas del ferrocarril de carga que va hacia la frontera norte.
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