El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró desde el interior de la Fiscalía General de la República (FGR) infiltrados buscaron informar al exprocurador, Jesús Murillo Karam, del proceso que tenía en su contra para evitar su detención.

"Lo que querían era que, por ejemplo, para hablar con claridad, no se detuviera al procurador Murillo Karam", dijo.

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López Obrador aseguró que la detención no se hubiera podido concretar si hubiera tardado un mes más.

El presidente de México dijo que dentro de la Fiscalía existió una rebelión por el nuevo informe entregado por la comisión encargada de la investigación del caso Ayotzinapa, e insistió que dicha indagatoria cuenta con elementos sólidos. 

“Cuando se enteran, aun cuando ellos llevaban los casos, se negaron a firmar, hubo una rebelión, eso fue lo que sucedió y, sin embargo, se fue hacia adelante", dijo. 

"En la desesperación, esa es mi hipótesis, quisieron dinamitar el proceso ampliando la lista de los presuntos responsables, pensando que de esa manera, que sí eran 5, 6 militares, agregaban 20 más, iba a decir ‘ya párenle', y si agregaban más acusados, lo mismo", comentó.

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López Obrador contó que él pidió apegarse a los datos del informe e insistió en que la investigación por el caso continúa. Desde el pasado 27 de octubre, el presidente López Obrador acusó a la Fiscalía Especializada en el caso Ayotzinapa de tratar de "dinamitar" la investigación de la desaparición de los 43 normalistas.

"Yo sostengo de que quisieron dinamitarnos la investigación para que no se actuara", dijo el mandatario en conferencia matutina.

López Obrador negó que Omar Trejo, exfiscal especial del caso que renunció al cargo, haya estado detrás de dichas prácticas.