Por Isabella González
El embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, afirmó que el gobierno de su país estaba dispuesto a extraditar a personas que trafican armas hacia territorio mexicano
Sin embargo, en una reunión con periodistas, a seis días de dejar el cargo como embajador, aseguró que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no pidió la extradición de nadie durante el año y medio de la gestión del diplomático.
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"Cuando vino el exfiscal William Barr, él vino dos veces durante mi gestión, y en conversaciones con las autoridades mexicanas dejó muy claro que nosotros estamos dispuestos a extraditar a traficantes de armas que han sido detenidos en Estados Unidos y que se les busca en México. Nunca recibimos una petición de extradición durante mi gestión. Me dio mucha pena porque me hubiera gustado ver una extradición así", señaló.
"Nosotros tenemos leyes que sí tienen que ver con prohibir la exportación de armas sin permisos de forma ilegal, así que cuando alguien manda armas a México está violando las leyes estadounidenses", agregó.
También advirtió que Estados Unidos ofreció al gobierno mexicano donar equipos no intrusivos para la localización de armas en la frontera compartida entre ambos países, pero las autoridades mexicanas no los han aceptado.
"Yo creo que este tema de las armas se usa para regañar a Estados Unidos, pero también México tiene que hacer más por esto", indicó.
"Es absolutamente imprescindible que hagamos más, pero esto va a requerir esfuerzos compartidos en ambos lados de la frontera", añadió el embajador.
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Landau aseveró que controlar el flujo de armas hacia México es un tema de enorme importancia porque también afecta a Estados Unidos.
"Nuestra segunda enmienda protege o da el derecho a nuestro pueblo a tener armas, pero no hay nada en la segunda enmienda que tenga que ver con exportar las armas a otros países", manifestó.
"Yo he dejado muy claro que es una enorme prioridad para ambos países ,para mí es como si estuviéramos mandando a Hitler en la segunda guerra. El crimen organizado es un problema no sólo para México, sino también para Estados Unidos", agregó.
El embajador saliente afirmó que este tema también es importante para la administración de Joe Biden, que iniciará este 20 de enero.
"Sí creo que hay más que podemos hacer pero también hay más que México puede hacer también para controlar eso. Tenemos que seguir colaborando. Como vimos en el 'Culiacanazo', es casi increíble el poder y las armas, que tiene el crimen organizado aquí", expresó.
Landau reconoció que la demanda de drogas en Estados Unidos es muy alta y que esto contribuye al poder del narcotráfico en México.
Reiteró que el gobierno estadounidense se decepcionó mucho con los nuevos lineamientos para regular la acción de agentes extranjeros y aseguró que este tema también preocupa a la administración de Biden.
"Es un tema de gran preocupación en Washington no sólo en nuestra administración, en la saliente, pero también yo sé en la entrante", señaló.
"Entiendo que hay mucha gente que decía que Estados Unidos no advirtió del general Cienfuegos pero creo que la respuesta no debe de ser que pongamos en peligro la colaboración. Estamos en comunicación continua con el gobierno de México sobre la implementación de la nueva ley y espero que se pueda implementar de una manera que no perjudique la comunicación entre ambos países", añadió.
Sobre el tema de salud pública, ante la crisis por Covid-19, Landau advirtió que la situación en la frontera está peor que nunca.
"Ha sido una gran frustración para mí, a mí me hubiera gustado abrir la frontera terrestre a todos los viajes ya hace rato, pero francamente la situación de salud pública ha sido muy delicada en esa región. Y ahora creo que está peor que nunca en ambos lados de la frontera", dijo.
"Espero que eso se pueda resolver ya con la vacuna. También va a ser muy importante que en ambos países tengamos programas de vacunación porque será muy difícil avanzar sin programas en ambos lados de la frontera", concluyó.