Aunque Texas ya registró su primera muerte y más de 60 contagios por el brote de coronavirus, el gobierno tardó en establecer medidas severas para combatir su propagación, en comparación con otros estados.
El pasado 13 de marzo, el gobernador Greg Abbott declaró estado de emergencia en todo el territorio, para tener un mayor apoyo federal para cuidar y atender a los texanos.
Con los nuevos recursos, la administración busca pasar de elaborar 200 pruebas de detección del COVID-19 al día a miles, a partir de esta semana.
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Para prevenir el contagio de una mayor cantidad de la población Abbott restringió las visitas en las casas de adultos mayores, centros para personas con una discapacidad y en las prisiones.
Además, en las principales ciudades de Texas se instalaron pruebas de coronavirus para los automovilistas, con personal médico especializado.
Escuelas suspenden actividades
Las escuelas de todos los niveles de 569 distritos escolares de Texas suspendieron sus actividades para evitar la propagación del coronavirus en niños y adolescentes. Las autoridades todavía no deciden el tiempo que durará el cierre, aunque se estima que podría extenderse hasta el final del ciclo escolar.
Entre las ciudades sin clases se encuentran San Antonio, Dallas, El Paso, Austin, Fort Worth y Houston.
Algunos estudiantes podrán estudiar con material en línea, pero algunos distritos todavía no cuentan con los recursos suficientes para lograrlo.
En las guarderías del estado se limitó el ingreso de las personas. Sólo los médicos, policías, trabajadores de los centros de cuidado, los niños y sus padres podrán entrar, después analizar su temperatura.
Asimismo, la Agencia de Educación de Texas decidió suspender el examen STAAR como requisito para entrar a las escuelas durante este año, a causa del cierre de escuelas.
Dallas y Houston cierran comercios
Los mandatarios locales de Dallas y Houston ordenaron suspender el servicio dentro de los restaurantes y bares, a partir de este lunes y se mantendrán así durante 15 días. Los establecimientos únicamente podrán servir comida para llevar.
San Antonio restringe reuniones
El gobierno de la ciudad de San Antonio prohibió las reuniones de más de 50 personas y pidió a los restaurantes acomodar las mesas con casi dos metros de separación, para evitar los contagios por coronavirus.