Reuters.- Dos personas murieron y otras siete resultaron heridas en un tiroteo en la oficina en Moscú de Wildberries, el mayor minorista en línea de Rusia, informaron los investigadores el miércoles, en una aparente escalada de una disputa sobre el futuro de la empresa.

El tiroteo, que tuvo lugar a pocas cuadras del Kremlin, se produjo unos dos meses después de que Wildberries se fusionó con otra empresa privada en un acuerdo que, según los medios de comunicación rusos, fue supervisado por la administración presidencial.

La fundadora y propietaria mayoritaria de Wildberries, Tatyana Bakalchuk, y su marido, Vladislav, que tenía una pequeña participación, se culparon mutuamente del incidente, que, según afirmaron, se produjo después de que un grupo, en el que estaba el esposo, llegó a la oficina.

El Comité de Investigación de Rusia, encargado de indagar delitos graves, abrió una causa penal y declaró que entre los heridos había dos policías. Uno de los muertos era un guardia de seguridad de Wildberries, según la empresa.

La agencia de noticias estatal rusa RIA informó de la detención de casi 30 personas, citando a las fuerzas del orden, pero no mencionó a ninguno de los implicados.

Wildberries anunció en junio su intención de fusionarse con Russ, una empresa más pequeña de publicidad en espacios exteriores, con el objetivo de crear una plataforma de comercio digital, sin embargo, Vladislav se opuso a la fusión.

Los medios de comunicación rusos informaron de que Maxim Oreshkin, jefe adjunto de la administración presidencial, había sido nombrado para supervisar la ejecución del acuerdo y el Kremlin declaró que el plan había obtenido el respaldo del presidente Vladímir Putin, pero que no interferiría en su progreso.

A finales de julio, Tatyana, la mujer más rica de Rusia según la revista Forbes, declaró que había solicitado el divorcio de Vladislav.

El miércoles, Wildberries y Tatyana dijeron que un grupo de individuos armados, dirigidos por Vladislav, había intentado entrar por la fuerza en la oficina.

El esposo explicó que él y sus representantes iban desarmados y que sólo habían ido a hablar de negocios, y que los guardias de seguridad de la empresa fusionada, RVB, habían disparado contra él y sus colegas.

Wildberries declaró que no se había programado ninguna reunión con Vladislav y publicó imágenes del interior del edificio en las que se veía a unos hombres peleándose al final de un pasillo, además, se oían tiros.

Otras imágenes filmadas desde el exterior y compartidas en las redes sociales mostraron a gente corriendo hacia la entrada, el sonido de disparos y hombres sacando armas de fuego.

La empresa, que comenzó como una plataforma en línea de reventa de ropa, ahora suministra de todo, desde electrónica hasta utensilios de cocina, y factura miles de millones de dólares.