Reuters.- Israel debe abordar urgentemente las catastróficas condiciones de la población civil palestina en la asediada Franja de Gaza y dejar de intensificar el sufrimiento limitando las entregas de ayuda, declaró este miércoles Estados Unidos ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
Refiriéndose a los informes sobre las condiciones de miseria en el sur y centro de Gaza, la embajadora estadounidense ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, declaró: "Estas condiciones catastróficas se predijeron hace meses y, sin embargo, aún no se han abordado. Eso debe cambiar, y ahora".
"Pedimos a Israel que tome medidas urgentes para hacerlo", afirmó en un contundente comunicado.
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El Consejo de Seguridad de 15 miembros se reunió para tratar la crisis humanitaria un año después de que un ataque mortal de militantes palestinos de Hamás contra el sur de Israel desencadenara la guerra en Gaza. Desde entonces, Israel ha arrasado gran parte del enclave y casi toda su población de 2.3 millones de habitantes ha sido desplazada.
Israel afirma que militantes de Hamás mataron a unas mil 200 personas el 7 de octubre de 2023, mientras que las autoridades sanitarias de Gaza afirman que casi 42 mil personas han muerto hasta ahora durante las represalias de Israel.
Thomas-Greenfield también se refirió a una reciente orden israelí para que los civiles del norte de Gaza vuelvan a evacuar, afirmando que deben poder regresar a sus comunidades para reconstruirlas.
"No debe producirse ningún cambio demográfico o territorial en la Franja de Gaza, incluida cualquier acción que reduzca el territorio de Gaza", afirmó Thomas-Greenfield.
Philippe Lazzarini, director de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos UNRWA, dijo al Consejo de Seguridad: "Cientos de miles de personas se ven empujadas de nuevo a desplazarse al sur, donde las condiciones de vida son intolerables".
"Una vez más, los habitantes de Gaza están al borde de una hambruna provocada por el hombre", afirmó.