EFE.- Los rebeldes hutíes de Yemen sostuvieron este domingo que Estados Unidos no tiene derecho a responder a sus ataques en el mar Rojo, donde este domingo un destructor estadounidense interceptó varios drones dirigidos contra embarcaciones que transitaban cerca de las costas del país árabe.

“Los estadounidenses no tienen el derecho de responder en el mar Rojo”, señaló el miembro del poderoso Consejo Político Supremo de los hutíes, Mohamed Ali al Huti, y añadió que Estados Unidos no aceptaría ninguna presencia militar de China, Rusia u otros en las aguas territoriales cerca de Florida.

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El vocero militar de los hutíes, Yahya Sarea, dijo este domingo en un discurso televisado que los insurgentes llevaron a cabo una operación contra dos barcos israelíes en el estrecho de Bab el Mandab, e identificó los buques como Unity Explorer, con bandera de Bahamas, y Number 9, con bandera de Panamá.

Por su parte, el Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) dijo en un comunicado que tres buques comerciales fueron atacados este domingo en el sur del mar Rojo, donde el destructor USS Carney respondió a las llamadas de socorro de los navíos, que sufrieron el impacto de misiles sin registrar víctimas.

Según la nota, el Unity Explorer, propiedad y operado por el Reino Unido, fue atacado con misiles balísticos disparados desde áreas controladas por los hutíes y, posteriormente, el USS Carney derribó un dron mientras el destructor ayudaba con la evaluación de daños de la embarcación comercial.

Poco después, otro misil alcanzó el buque Number 9, de propiedad de Bermudas y operado por el Reino Unido, en un ataque en el que se registraron daños pero no víctimas.

La última embarcación atacada con un misil fue el Sophie II, de bandera de Panamá, misma que no informó de daños significativos. Cuando el USS Carney se acercó para dar apoyo, derribó otro dron que se dirigía hacia el destructor, según la nota.

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La nota apuntó que Estados Unidos tiene razones para creer que aunque los hutíes hayan reivindicado los ataques, estos son plenamente permitidos por Irán, país que respalda a los insurgentes yemeníes.

“Estados Unidos considerará todas las respuestas apropiadas en plena coordinación con sus aliados y socios internacionales”, sentenciaron.

Tras el estallido de la guerra en la Franja de Gaza, los hutíes amenazaron con atacar buques con la bandera de Israel o propiedad de empresas israelíes que transiten por el mar Rojo en apoyo al grupo islamista palestino Hamás.

A mediados de noviembre, los insurgentes capturaron el carguero Galaxy Leader, que transportaba vehículos, mismo que es operado por la naviera japonesa Nippon Yusen (NYK Line) y que sería propiedad parcial de un empresario israelí.