AP.- La costa sur de Ucrania quedó destruida por la guerra este sábado, ya que las fuerzas de Rusia lanzaron misiles cruceros en la ciudad de Odesa y bombardearon una planta siderúrgica que albergaba a civiles y combatientes ucranianos, con la esperanza de completar su conquista del puerto de Mariúpol a tiempo para las celebraciones del Día de la Victoria, celebración rusa sobre la Alemania nazi.

Sin embargo, en una señal de la inesperada respuesta de la defensa que ha sostenido la lucha en su undécima semana, el ejército ucraniano derribó posiciones rusas en una isla del Mar Negro que fue capturada en los primeros días de la guerra y se ha convertido en un símbolo de resistencia ucraniana.

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Analistas militares de Occidente indican que una contraofensiva ucraniana también avanzaba en la segunda ciudad más grande del país, Járkov, incluso cuando seguía siendo un blanco principal de ataques rusos. El ejército ucraniano dijo que retomó el control de cinco aldeas y parte de una sexta cerca de la muy disputada Járkov.

Al acercarse la festividad rusa del lunes que conmemora la derrota de la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial, las ciudades en Ucrania se preparaban para un aumento anticipado de ataques rusos. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, exhortó a residentes paralizados por más de 10 semanas de guerra a acatar las alertas de redadas aéreas.

La viceprimera ministra Iryna Vereshchuk dijo que todas las mujeres, niños y ancianos fueron evacuados de la planta siderúrgica asediada por las fuerzas rusas.

“Se ha cumplido la orden del presidente”, dijo. “Todas las mujeres, niños y ancianos han sido evacuados de la Azovstal. Esta parte de la operación humanitaria en Mariúpol se ha completado”.

El secretario de estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo el sábado que Zelenski y su pueblo “representan el espíritu de aquellos que prevalecieron durante la Segunda Guerra Mundial” y acusó al presidente ruso, Vladimir Putin, de querer “distorsionar la historia para intentar justificar su no provocada y brutal guerra contra Ucrania”.

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Las batallas más intensas en días recientes se han desarrollado en el este de Ucrania, en donde ambas partes están atrincheradas en una carrera feroz por capturar o reclamar territorio. La ofensiva de Moscú en el este de Ucrania se ha centrado en capturar la región industrial de Donbás, en donde separatistas respaldados por rusos han luchado desde el 2014 para ocupar algunas zonas.

Moscú también ha intentado arrasar el sur de Ucrania tanto para aislar al país del mar y conectar su territorio con la escindida región de Transnistria en Moldavia, desde hace mucho tiempo hogar de las tropas rusas. Pero ha batallado para alcanzar dichos objetivos.