Tras 11 semanas de aislamiento, encierro y distanciamiento social en Wuhan, la población comenzó a salir de sus casas. Pero mientras la ciudad estaba bajo confinamiento, los residentes escribían mensajes en homenaje a Li Wenliang, doctor que murió después de advertir sobre el COVID-19.

Según el Washington Post, los usuarios de Weibo, red social china, acudieron al perfil del doctor para pedir consejos y lidiar con su ansiedad por el encierro. Una usuaria con insomnio le preguntó si debería agregar más leche a un postre que cocinó para su hijo.

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Un hombre de la provincia de Sichuan le preguntó a Li qué debería hacer si no conseguía los permisos de viaje necesarios para sus familiares. 

En la mayoría de las publicaciones, los usuarios de Weibo se dirigían al doctor como “hermano Liang” o “viejo Li”.

La policía detuvo a Li Wenliang, de 34 años, en diciembre del 2019 por publicar noticias sobre el COVID-19. El doctor ya estaba contagiado.

Li falleció el 7 de febrero pasado en el Hospital Central de Wuhan, su lugar de trabajo. En su lecho de muerte defendió la importancia de la libertad de expresión en su país.

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El WP reportó que Li, después de su muerte, se convirtió en un motivo para criticar al Partido Comunista. Pero el gobierno de China respondió a la rabia de la sociedad. Elogió al doctor como un héroe, además de inculpar a las autoridades locales por su muerte y censura.