Una presunta negligencia médica en el Hospital Regional "Gral. Ignacio Zaragoza" del ISSSTE de la Ciudad de México fue denunciada por Yesenia González Tamayo, pues teme que debido a la falta de atención adecuada su hijo Jhovany Ramírez González, de 21 años, pueda perder un pie tras sufrir un accidente en motocicleta el pasado 22 de enero.
Según el testimonio de su madre a Latinus, Jhovany, quien trabaja en la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de México, se impactó contra la parte trasera de una camioneta que frenó de manera repentina en las inmediaciones del metro Pantitlán, cuando regresaba de su trabajo. El golpe lo lanzó al carril del Mexibús, donde, según relató, "a mi hijo le pasó la unidad en las piernas".
De acuerdo con los registros proporcionados por la madre del joven, fue la unidad 037 del Mexibús la involucrada en el incidente.
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A pesar de ser derechohabiente del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), no recibió atención inmediata y tuvo que esperar varias horas hasta ser trasladado al hospital Zaragoza.
En el hospital, relata la madre de Jhovany, los médicos lo canalizaron al área de ortopedia, donde fue dado de alta la mañana del 23 de enero con sólo una férula y radiografías, sin realizar estudios adicionales.
Ante el persistente dolor y la falta de mejoría, su madre señaló que buscó atención en otras instituciones médicas el 24 de enero, pero fue rechazada bajo el argumento de que su hijo era derechohabiente del ISSSTE.
Desesperada, Yesenia González costeó una resonancia magnética de manera particular y regresó con los resultados al hospital ISSSTE Zaragoza. Sin embargo, hasta la madrugada del 25 de enero, los médicos del hospital no habían tomado acciones para tratar la lesión de su hijo. Según su denuncia, el personal médico de guardia se encontraba descansando mientras pacientes requerían atención urgente.
“Es negligencia médica. Si la gente viera que aquí los doctores que se supone que están de turno duermen mientras la gente necesita cirugías y demás”, aseveró.
La madre del joven aseguró que no fue sino hasta la tarde de este sábado, más de dos días después de su ingreso al hospital, cuando su hijo fue llevado a quirófano “para quitarle los hematomas y poder ver si se le salva la pierna”.