Por Marco Antonio Duarte / Corresponsal
Michoacán.– El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) utilizó “bombas químicas” contra agentes de la Policía Comunitaria del municipio costero de Coahuayana, durante la irrupción de más de un centenar de presuntos delincuentes registrada la semana pasada, la cual dejó una persona muerta y nueve más heridas en el fuego cruzado.
Así lo confirmó Héctor Zepeda Navarrete “El Teto”, comandante de la Policía Comunitaria de este municipio enclavado en la costa del pacífico michoacano, colindante con el estado de Colima, quien reveló que cinco de sus elementos resultaron intoxicados, dos de ellos de gravedad.
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Zepeda Navarrete explicó que el CJNG utilizó aditamentos lanzacohetes, conocidos en el argot de la delincuencia como “lanzapapas”, para arrojar bombas con químicos asfixiantes en la serie de emboscadas que los días 9 y 10 de marzo sufrió la Policía Comunitaria, en los poblados de Palos Marías, El Camalote y La Presa, este último también conocido como “Sal si puedes”.
“Cuando —los criminales— estaban arriba de los cerros disparándonos en unas barranquillas, nos aventaron químicos con un lanzacohetes o un ‘lanzapapas’ que traían, porque volaban muy lejos y tronaba esa cosa que nos aventaban. Era un polvo químico que se desparramaba como si fuera humo”, indicó.
A su vez, el alcalde Gildardo Ruiz Velázquez, emanado del extinto partido local Fuerza por México, llamó a los gobiernos federal y estatal a replantear la estrategia de seguridad en Coahuayana, municipio que antes de la irrupción del CJNG tenía una década sin conflictos armados, tras la mutación de las autodefensas en la Policía Comunitaria, al mando de Héctor Zepeda.
“Esa paz que teníamos se vio interrumpida por la invasión del Cártel de Jalisco. Sabíamos que venía la invasión de Colima, donde estaban —los delincuentes— se quemaron carros, camiones y se ha hecho un desorden muy grande”, explicó.
La Policía Comunitaria precisó que la irrupción del CJNG dejó un habitante muerto y nueve heridos de bala más, quienes quedaron en el fuego cruzado. El gobierno del morenista Alfredo Ramírez Bedolla no ha reconocido el asesinato del civil ni el número de personas heridas. La de violencia provocó una serie de protestas y bloqueos de ciudadanos en la carretera federal que une Coahuayana con Colima.
Coahuayana es uno de los tres municipios michoacanos que se ubican en la costa del Pacífico, por lo que el CJNG y otros cárteles buscan controlar el litoral para traficar cargamentos de cocaína que son enviados en buques, o en lanchas con motores fuera de borda, desde países sudamericanos como Colombia y Ecuador.