Por Fidel Pérez / Corresponsal
Veracruz.- La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del gobierno del estado confirmó la detención de cuatro integrantes de una banda de narcomenudistas, presuntos responsables de la masacre ocurrida ayer en San Andrés Tuxtla; se habla de un quinto implicado.
Después de la activación del Código Rojo, elementos de la Policía Estatal, en coordinación con autoridades federales, lograron la detención de los sujetos y dejó resguardado el lugar del crimen para protección ciudadana.
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Alejo “N”, Víctor Manuel “N”, Sergio “N” y Maribel “N”, quienes fueron identificados por los sobrevivientes del atentado, quedaron a disposición de la Fiscalía General de Veracruz, organismo que continúa investigando el caso.
La SSP detalló que a los detenidos se les aseguró un arma de fuego corta y una larga, cartuchos útiles, 30 dosis de una droga parecida al cristal, un paquete con hierba verde similar a la marihuana y siete bolsitas con la misma hierba.
También se les decomisó un vehículo Nissan tipo Tsuru que aparentemente funcionaba como taxi.
Precisó que los cuatro detenidos forman parte de una célula criminal y están implicados en delitos como robo y desaparición de personas.
El grupo armado irrumpió ayer en la vivienda de Felipe Acua Mirós, ubicada en la colonia Cardenista de San Andrés Tuxtla, asesinó a su esposa Bertha y a sus dos hijos Claudia e Iván, ambos menores de edad.
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De acuerdo con las autoridades, la presunta banda responsable de los asesinatos quería obligar a la familia a vender su mercancía ilegal, porque el papá, Felipe, quien está hospitalizado por las lesiones causadas durante el ataque, también habría comercializado drogas.
Durante el ataque, Acua Mirós, de 57 años, resultó con una lesión en la cabeza y otra en el tórax, mientras que Matilde, su otra hija de nueve años de edad, también recibió un impacto de bala; ambos fueron trasladados al hospital Doctor Bernardo Peña.
Durante marzo, el norte del estado cerró con cuatro asesinatos, entre ellos el exregidor de Castillo de Teayo, Saúl Ramírez y sus dos sobrinos.
También, la tarde del domingo 31 de marzo, en la comunidad de Francisco Sarabia, perteneciente al municipio de Misantla, un joven con el apodo de “Chacoyo” fue víctima de un ataque armado que acabó con su vida.