La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) pidió este martes a los gobiernos de Chihuahua y Coahuila entregar los libros de texto de la Secretaría de Educación Pública (SEP) del ciclo escolar 2023-2024 a los planteles que no los hayan recibido para respetar el derecho a la educación e igualdad.
A través de un comunicado la CNDH señaló que la omisión de la distribución de los libros de ambos gobiernos "vulneró los derechos humanos a la educación, a la igualdad, a la participación y al principio del interés superior de la niñez, en agravio de niñas, niños y adolescentes que cursan su educación básica".
Asimismo, pidió a las autoridades educativas de ambos estados que los estudiantes "no sean susceptibles de ser evaluados con calificaciones no aprobatorias en el presente ciclo escolar (con el fin de garantizar su continuidad académica)".
De igual forma, la CDNH indicó que tanto el gobierno de Coahuila como el Chihuahua "deberán emitir un comunicado donde reconozcan que con la interposición de las controversias constitucionales y la instrucción de no entregar los libros de texto se generaron agravios en perjuicio de los niños".
"Ambos gobiernos tendrán que dar vista a las instancias correspondientes para iniciar procedimientos administrativos relacionados con la omisión en la entrega y distribución de los libros de texto gratuitos", se lee en el comunicado de la CNDH.
La CNDH señaló que la recomendación que hizo hacia ambos gobiernos es derivado a una queja que recibieron el año pasado por docentes y familiares, donde acusaron que el retraso de la entrega de libros obstaculizó el derecho a la educación de los estudiantes.
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Ambos gobiernos en agosto del año pasado suspendieron la distribución de los libros hasta que se definieran los amparos contra su distribución.
En mayo pasado, un juez concedió una suspensión definitiva para que la SEP verificara si se siguieron todos los procedimientos legales para la determinación de los planes de estudio y para la publicación de los libros.
Si no cumplía con este requerimiento, la SEP debía suspender la impresión y entrega de los libros hasta que cumpliera con lo previsto en la ley.