La dirigencia nacional de Morena cerró sus asambleas informativas por el país con un llamado a la unidad y a no dejar que la oposición se fortalezca y le gane espacios por alguna debilidad morenista. 

Fue en voz del hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador, Andrés Manuel López Beltrán, secretario de Organización, el encargado de lanzar este llamado desde Tlatelolco en la Plaza de las Tres Culturas de la Ciudad de México.

“Que no olvidemos que aunque actualmente la oposición se encuentra moralmente y políticamente derrotada, el más grande riesgo que tenemos es fortalecerla con nuestra división interna”, arengó.

Ante unas dos mil personas reunidas, y en lo que fue su segunda intervención en los actos políticos que se realizaron en las 32 entidades del país, López Beltrán pidió cuidar el legado de su padre.

“Cuidar el legado y aportar a la transformación del país pasa por construir un partido fuerte, del tamaño de la simpatía y el apoyo que tiene”, dijo.

Ante simpatizantes poco participativos y que esperaron durante más de tres horas que comenzara el evento, el político tabasqueño destacó que el evento se realizó en la Plaza de las Tres Culturas porque ahí fue donde hace 12 años su padre “inició su lucha contra el autoritarismo”.

Antes de terminar su discurso no quiso dejar pasar la oportunidad para agradecer a la Ciudad de México su hospitalidad y prometió luchar por ella.

“Yo y mi familia seremos tabasqueños de nacimiento, pero nos consideramos chilangos por adopción y por convicción. Esta ciudad nos dio todo y le debemos absolutamente todo, por eso le dedicaré mi vida y siempre lucharé por su bienestar, pero sobre todo por los más pobres”, dijo.

Las palabras de López Beltrán apenas alcanzaron algunos aplausos entre los simpatizantes; no obstante la poca participación, arengó: “¡Viva la Ciudad de México!”.

En su turno, la presidenta de Morena, Luis María Alcalde, también llamó a la unidad para alcanzar más de 10 millones de credencializaciones el próximo año; además, pidió a sus simpatizantes imaginar un México sin Morena.

“Deténganse a pensar por un segundo qué sería de este país si no existiera Morena. ¿En manos de quién dejamos a la patria, a las generaciones actuales y a las futuras?”, preguntó.

En ese sentido, pidió a sus huestes no confiarse porque están en el poder.

“La opción de ‘la oposición está moralmente derrotada’ no es opción, así que no podemos hoy confiarnos, porque como siempre nos enseñaron, ‘amor con amor se paga’”, aseguró.

Durante esta gira para llamar a la unidad de los morenistas se realizaron asambleas en las 32 entidades del país en el que participaron 600 síndicos, 300 regidores, 450 legisladores, 66 senadores, 23 gobernadores y 112 mil militantes.