El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, reconoció este viernes los hechos de violencia que se han suscitado en el estado en los últimos meses por enfrentamientos entre grupos criminales, pero aseguró que “no es como para inmovilizarnos”.
“Tenemos una propaganda que han dicho que en Sinaloa no se puede estar por la violencia, en efecto la tenemos, no la negamos, pero no es como para inmovilizarnos, tenemos un operativo en el que que me han ayudado mucho las Fuerzas Armadas y nuestros cuerpos estatales”, dijo en su informe en el Congreso de Sinaloa.
El gobernador recordó que en los últimos dos días se registraron homicidios en unos inmuebles identificados como “casas clandestinas de juego”, y también señaló que en las mañanas se planea cómo se va a proceder para atender estas situaciones.
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“El robo de carros, los homicidios, que todavía no nos dejan, el tema de las personas privadas de la libertad, esos tres temas los estamos atendiendo con operativos específicos”, comentó.
Informe entre protestas y homicidios
Rocha Moya aseveró que seguirá trabajando en coordinación con los tres niveles de gobierno “hasta restaurar la normalidad de la paz, combatiendo a la delincuencia”.
De acuerdo con el mandatario estatal, se atenderá la estrategia planteada por el gobierno federal de fortalecer la seguridad con labores de inteligencia, investigación y los programas sociales dirigidos a los jóvenes.
“Nunca he negado, ni negaré que el problema de la inseguridad aún existe, pero también asumo que lo venimos y lo seguiremos atacando con todas las fuerzas del orden y los recursos disponibles; téngase bien presente: no cederé en este compromiso hasta que la ciudadanía recobre su derecho a circular segura y libremente por los espacios públicos”, afirmó.
De acuerdo con el informe diario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), el jueves se registraron 14 homicidios dolosos en Sinaloa, de un total de 86 que se contabilizaron en todo el país.
Asimismo, en las inmediaciones del Congreso estatal se manifestó un grupo de ciudadanos para exigir la revocación de mandato del gobernador Rocha Moya.