La presidenta Claudia Sheinbaum justificó este viernes la reforma constitucional, aprobada ayer por el Senado de la República, que elimina la existencia de siete organismos autónomos.
Las funciones del algunos que sirven de contrapesos o reguladores, como el Instituto Nacional de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales (INAI) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), serán absorbidas por secretarías de Estado.
“Ahora dicen que los organismos autónomos es quitar pluralidad, que ahora va a haber un gobierno autoritario. Claro que se va a seguir regulando, pues esa es una de las grandes tareas del Estado, pero es una visión completamente distinta, acabar con la corrupción, con los privilegios”, aseguró.
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Sheinbaum hizo referencia especial a la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece). La acusó de trabajar en favor de los intereses de los empresarios.
“Los organismos autónomos se crearon no para acabar con los monopolios privados. ¿O qué ha cambiado? No, era para evitar que las empresas del Estado, particularmente Pemex (Petróleos Mexicanos) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) fueran reconocidas como empresas públicas y no como monopolios. Cofece se ha dedicado a parar a las empresas públicas”, señaló.
Según la presidenta, la reforma busca devolverle al Estado la rectoría de diferentes actividades. Aclaró que no implica cerrarse a la participación de los particulares.
“Lo que estamos recuperando es una visión en donde sí tiene que haber inversión privada, inversión extranjera directa, pero el Estado está recuperando una visión y las empresas públicas son empresas públicas que no pueden considerarse como monopolios”, insistió.