Fernando del Collado conversa con Adrián LeBarón, activista civil, quien le reclama a la presidenta Claudia Sheinbaum no tener “la mínima empatía hacia las víctimas y familiares” de la violencia en este país sino, además, el no haber cumplido con su compromiso de recibirlos en el Palacio: “Ni Sheinbaum ni la Secretaría de Gobernación nos han recibido”, dice, y le recuerda que su deber es la protección de los gobernados y la persecución de la justicia. “No acepto negligencia de las autoridades, es complicidad”, señala.
Adrián LeBarón, padre de Rhonita, una de las nueve personas asesinadas hace cinco años en la emboscada contra las familias LeBarón, Langford y Miller en el municipio de Bavispe, Sonora, recuerda que esos crímenes siguen impunes, señala que las masacres no han disminuido y exige que los actos del crimen organizado sean clasificados como terroristas: “La presidenta Sheinbaum no debería lavarse las manos en el tema de las masacres”.
El activista civil se opone a la desaparición de los órganos autónomos, observa un país cada vez más dominado por las organizaciones criminales y recrimina que ninguna estrategia contra la inseguridad haya funcionando: “O sea, ¿dónde está el cambio?”. Y hace un llamado a los ciudadanos para enfrentar “el miedo” y reorganizarse para sacar a la llamada 4T y a los gobiernos ineficaces. Señala que al llamado de Jalisco para salir del Pacto Federal deberían sumarse Chihuahua y Nuevo León. “La presidenta cree que con el poder pueden hacer y deshacer la voluntad de los mexicanos”, sentencia.