Hoy, Carolina Hernández analiza en su videocolumna el “salvaje”asesinato del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, decapitado una semana después de asumir el cargo, y la falta de respuesta de los gobiernos ante la violencia que azota la región.
Hernández cuestiona el hecho de que a Omar García Harfuch no le pareciera “obvia” la necesidad de otorgarle mayor seguridad al alcalde a pesar de que unos días antes en la misma localidad fueran asesinados Ulises Hernández Martínez, exdirector de la Unidad de Fuerzas Especiales de la Policía Estatal, quien iba a ser nombrado secretario de Seguridad Pública por Arcos, y Francisco Gonzalo Tapia, secretario del Ayuntamiento.
La analista cuestiona si el asesinato de Arcos, la violencia sin control de los criminales y la posibilidad de que sean los narcos quienes gobiernan no son un indicador suficiente de que la actual gobernadora Evelyn Salgado está frente a un Estado fallido.