Juan Luis González Alcántara Carrancá, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), aseguró esta tarde que la función más importante del Poder Judicial dentro de un Estado constitucional es el de proteger a los ciudadanos frente a los actos de gobierno e imponer límites conforme a las reglas del orden constitucional.
"Pensar que un gobierno electo democráticamente es incapaz de violar esas reglas es desconocer nuestra historia", comentó.
Asimismo, el ministro afirmó que el pueblo tiene una pluralidad de voces en la que es importante que cada voz individual sea protegida por los jueces, ministros y magistrados frente a "la marea de la opinión pública".
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"El pueblo no tiene una sola voz, no es solamente una persona como tampoco es sólo un sector, el más numeroso o el más estridente o el más favorecido. El pueblo es cada una de las personas que lo comprende, con sus propios proyectos, intereses, anhelos y aspiraciones", dijo el ministro.
El ministro participó en la mesa sobre independencia judicial del XVI Congreso Iberoamericano de Derecho Constitucional en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El ministro González Alcántara también cuestionó que se hagan comparaciones entre los funcionarios electos democráticamente y quienes imparten justicia, desde la visión en la que uno acuña "frases memorables" y desarrolla grandes obras, mientras que los juzgadores en su escritorio resuelven "pleitos ajenos" que sólo generan papel.
En la misma mesa también estuvo presente Eduardo Ferrer Mac-Gregor, juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que expresó que la independencia judicial no está en peligro solamente en nuestro país, sino que se trata de un contexto global.
Ferrer Mac-Gregor puso como ejemplo el trabajo que realiza la CIDH y algunas de sus sentencias han exaltado la importancia de la independencia judicial, así como los derechos de los ciudadanos de contar con jueces independientes y dijo que "cualquier demérito o regresividad en la independencia de los jueces es inconvencional porque puede tener un impacto sistémico igualmente regresivo al Estado de derecho".
"Hoy la batalla por el Estado de derecho es la batalla por la independencia judicial", expresó el juez del tribunal interamericano.
En el acto de apertura del congreso participó la ministra presidenta de la Suprema Corte, Norma Piña Hernández, en la que aseguró que uno de por propósitos del Poder Judicial es proteger los derechos humanos y ser un contrapeso al poder.
"Hay evidencia que proporciona la historia y el presente en muchas latitudes de que los derechos humanos están en riesgo cuando el poder no puede ser contenido, frenado y controlado", dijo durante su intervención.