Cuando Claudia Sheinbaum Pardo descienda este martes del vehículo que la dejará en la puerta de acceso de la Cámara de Diputados, estará a 210 pasos de rendir protesta como presidenta constitucional de México. 

Lo hará en medio de calles y avenidas bloqueadas desde hace tres semanas, primero, por uniformados de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, quienes desplegaron vallas y camiones que formaron filtros vehiculares y peatonales. 

Desde hace 10 días, la Secretaría de la Defensa Nacional se hizo cargo de la seguridad y extendió unos 500 metros más el perímetro de retenes; el despliegue de seguridad parece una foto de diciembre de 2006, cuando rindió protesta Felipe Calderón, en medio de acusaciones de haber hecho fraude para ganar.   

Para llegar a la puerta que se abre solamente cada seis años sobre avenida Congreso de la Unión, Sheinbaum Pardo se midió con morenistas como Ricardo Monreal, Adán Augusto López Hernández, Marcelo Ebrard y Gerardo Fernández Noroña, a quienes dobló como “corcholata” para obtener la candidatura presidencial de Morena y aliados. 

Caminará ocho pasos para llegar a la primera escalinata, tras una trayectoria política que comenzó en 1989 en el ahora extinto Partido de la Revolución Democrática (PRD). 

Tras subir los primeros 12 escalones antes de llegar al asta bandera del recinto legislativo de la Cámara de Diputados, será recibida por una comisión de legisladores, quienes la acompañarán hasta el salón de sesiones.    

La comitiva la acompañará 28 pasos con ella antes de llegar a la segunda escalinata, en un recorrido que ya hizo en el 2000, que es el año en el que fue designada como Secretaria del Medio Ambiente de la Ciudad de México en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador

Otros 27 pasos a las puertas del frontispicio donde hará el saludo civil al lábaro patrio tras derrotar en las urnas el pasado 2 de junio a la candidata opositora Xóchitl Gálvez.  

Dará 30 pasos más de la puerta de cristal al acceso principal al recinto, donde un legislador de cada uno de los seis grupos parlamentarios, habrán concluido su posicionamiento. 

Andrés Manuel López Obrador, como presidente que deja el cargo, ni Sheinbaum Pardo no los verán ni los oirán.

López Obrador acudió el primero diciembre de 2018 para recibir la banda presidencial del finado Porfirio Muñoz Ledo a quien en sus últimos días se distanció del mandatario, mientras que López Obrador no había regresado a la Cámara de Diputados.

De la puerta principal ahí a la tribuna el recorrido alrededor de Sheinbaum Pardo se convertirá en una lucha cuerpo a cuerpo entre los diputados de la llamada 4T, para estar cerca de la presidenta en la búsqueda, de la foto, la selfie, la petición, el abrazo y el saludo. 

Son 75 pasos que se harán lentos, pesados como ocurrió luego del sismo de septiembre de 2017, cuando se cayó el Colegio Rébsamen, siendo ella jefa delegacional de Tlalpan. 

Ese andar como en cámara lenta, denso, se dio en el choque de trenes en la estación Tacubaya en marzo de 2020; el incendio en el Centro de Control del Metro en enero de 2021, y más aún, luego del colapso de un tramo elevado de la Línea 12 en mayo de 2021, en el que hubo 26 fallecidos, el accidente con más víctimas en la historia del sistema de Transporte Colectivo Metro. 

Alrededor de las 11:00 de la mañana se tiene previsto que la aún presidenta entre al salón de sesiones para ocupar su lugar en la Mesa directiva, minutos después de la última intervención en tribuna de los grupos parlamentarios.

Luego de que Ifigenia Martínez, presidenta de la Cámara de Diputados, coloque la banda presidencial a Sheinbaum Pardo, hará uso de la tribuna para dirigir su primer mensaje a la nación luego de más de mil días de haber recorrido el país.

Serán los primeros 210 pasos de Sheinbaum Pardo para rendir protesta y los últimos de López Obrador, quien entró al recinto legislativo como presidente y se irá por una puerta lateral como ciudadano.