El secretario de Seguridad federal, Omar García Harfuch, dijo que la presidenta Claudia Sheinbaum dará a conocer en breve la estrategia de seguridad de su gobierno, aunque anticipó que tendrá continuidad en lo hecho en la materia por el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
“Por supuesto, vamos a establecer la estrategia que en su momento la presidenta va a dar a conocer; y a trabajar por México, como siempre lo hemos hecho, en total coordinación con las autoridades de seguridad. (…) Vamos a continuar con la estrategia de seguridad del expresidente Andrés Manuel López Obrador que inició este cuerpo de la Guardia Nacional, pero también al mismo tiempo se estaban atendiendo las causas, vamos a continuar con esto”, dijo a Latinus.
A su llegada este martes a la Cámara de Diputados para la ceremonia de cambio de la presidencia de la República, el nuevo secretario de Seguridad y Protección Ciudadana defendió la transferencia de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional.
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“Al contrario, que pase la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional es algo que, como dije en el Senado, nosotros celebramos, votamos a favor de este reforma, ya que la Guardia Nacional está en la Secretaría de la Defensa Nacional, va a permitir que este cuerpo se consolide, y que no pase como en otros sexenios, cada sexenio volvemos a empezar de cero”, sostuvo.
La violencia en México, tras un récord de más de 190 mil homicidios en el gobierno del presidente López Obrador y una nueva pugna interna del Cártel de Sinaloa, será el desafío principal de la nueva presidencia de Claudia Sheinbaum y ha prometido mantener la estrategia de "abrazos, no balazos".
Tras su triunfo el 2 de junio, Sheinbaum, primera presidenta de la historia de México, afirmó que para reducir los índices de violencia e inseguridad en su gobierno daría continuidad a la política de seguridad y militarización comenzada por López Obrador con la creación, en 2019, de la Guardia Nacional.
Precisamente, el miércoles pasado, el Senado aprobó la polémica reforma para ceder al Ejército el control de la Guardia Nacional, un cuerpo de seguridad de más de 130 mil agentes creado por el presidente, entre denuncias de "militarización ilimitada" de la oposición.