Por Alina Navarrete / Corresponsal
El director de Gobernación de Guerrero, Francisco Rodríguez Cisneros, acordó una mesa de diálogo con los pobladores que protestan en Chilpancingo, sin embargo, el bloqueo en la Autopista del Sol se mantiene.
Alrededor de las 9:00 horas, Francisco Rodríguez llegó al Parador del Marqués, donde los pobladores de Quechultenango, Chilapa de Álvarez, José Joaquín Herrera, Atlixtac y Acatepec, cerraron la autopista y la carretera federal México-Acapulco, para exigir obras.
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Luego de un breve diálogo, el funcionario acordó que una comisión se trasladará al Palacio de Gobierno para realizar la negociación correspondiente, pero el bloqueo y la retención de funcionarios, policías estatales y gendarmes, se mantiene.
En conferencia de prensa, el presidente de la Unión de Comisarios, Guillermo Matías Marrón, afirmó que es mentira que los pobladores acudieron armados y que están vinculados a los dos transportistas detenidos por la Fiscalía General de la República (FGR) como presuntos integrantes de “Los Ardillos”, como informó anoche el secretario general de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez.
Guillermo Matías pidió a Ludwig Marcial Reynoso que si identificó a familiares de los detenidos “que venga a decir quiénes son, nosotros no los conocemos“. Además, insistió en que las autoridades reprimieron al contingente y no buscaron el diálogo.
Hasta las 9:40 horas el bloqueo continúa, mientras que en Chilpancingo están suspendidas clases, labores en oficinas del gobierno del Estado y el transporte público está parcialmente suspendido, principalmente al sur de la capital.
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Ayer, pobladores de Quechultenango y Colotlipa tomaron las instalaciones del gobierno estatal y el Congreso de Guerrero en Chilpancingo.
Antes, bloquearon la Autopista del Sol y se enfrentaron con elementos de la Guardia Nacional y la Policía estatal, a quienes despojaron de un vehículo blindado, el cual fue usado para tomar el Congreso en la capital estatal.
Los pobladores anunciaron el domingo pasado que cerrarían la Autopista del Sol en Chilpancingo, donde el sábado se registró una jornada violenta que dejó cinco transportistas asesinados y tres personas heridas, por lo que las autoridades desplegaron un fuerte operativo de seguridad en la carretera federal México-Acapulco, frente al cuartel de la Guardia Nacional.