EFE.- El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, defendió el sábado ante el Parlamento las misiones de los médicos cubanos en el extranjero, a pesar, dijo, de la “sucia campaña” de Estados Unidos.

“La cooperación internacional de Cuba sigue desarrollándose como una actividad legítima y altruista que mantenemos a pesar de la sucia campaña de Estados Unidos“, señaló el mandatario al cerrar la sesión parlamentaria.

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En su discurso no ofreció más detalles sobre las críticas hacia el trabajo del personal médico cubano, pero insistió en que el propósito es “privar a miles de personas del mundo de los servicios médicos y de calidad” ofrecidos por los isleños.

Previamente, el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, cargó contra una convocatoria del gobierno estadounidense que “asigna fondos millonarios para fomentar campaña contra la colaboración médica”.

“Sin argumentos, (Estados Unidos) recurre una vez más a la calumnia para desacreditar la noble labor humanitaria y solidaria de Cuba en apoyo a la salud de otros pueblos”, consideró en Twitter el canciller.

Rodríguez agregó en esa red social que el país vecino intenta así “continuar privando a Cuba de fuentes de ingresos económicos e incentiva el robo de personal médico formado por nuestro país, con fines claramente subversivos”.

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Consideró “totalmente legítimo” los programas de colaboración médica que la isla mantiene en varios países, mientras subrayó que Washington “comete un crimen al pretender negarlo u obstaculizarlo con motivos políticos”.

Datos oficiales enumeran en 23 mil 792 la cantidad de cubanos del sector de la salud que trabajan en 56 naciones en la actualidad.

El Departamento de Estado estadounidense considera que las misiones de médicos cubanos en el extranjero son “un caso indiscutible de trabajo forzado”.

Es por ello que el pasado 15 de junio anunció que mantenía a Cuba en su “lista negra” de países que no cumplen con los estándares mínimos de lucha contra la trata de personas.