Reuters.- La policía nicarag\u00fcense detuvo la madrugada del sábado a cuatro sacerdotes más, para sumar 12 en los últimos tres días, dijo a Reuters un miembro de alto rango de la Iglesia católica con conocimiento del tema y según consignaron medios locales.
En la madrugada fueron sacados de sus casas los sacerdotes Mikel Monterrey, Gerardo Rodríguez y Raúl Zamora, junto con monseñor Miguel Mantica, hijo de una de las familias más ricas de Nicaragua, dijo la fuente.
No te pierdas: Nicaragua retira a su embajador en Argentina por la postura de Milei contra el gobierno de Ortega
“Están confirmadas las detenciones por las que preguntas, todos son de la Arquidiócesis de Managua y pensamos que lo que quieren es expulsarlos del país”, dijo el miembro de alto rango de la Iglesia, quien habló bajo condición de anonimato por temor a represalias.
En los últimos días, han sido detenidos en Nicaragua 12 sacerdotes y el obispo Isidro Mora, que junto al obispo Rolando Álvarez \u2014condenado a 26 años de cárcel\u2014 son los miembros de más alto rango de la Iglesia, detenidos en Nicaragua, donde el presidente Daniel Ortega gobierna desde 2007 y ha entrado en confrontaciones directas con los católicos.
Ortega acusa a los sacerdotes de prestarse para darle un golpe de Estado en 2018, cuando estallaron las protestas callejeras que el gobierno reprimió y dejó un saldo de 360 fallecidos, la mayoría opositores, víctimas de la policía y civiles armados leales al gobierno, según organismos internacionales de derechos humanos.
Los obispos pidieron a Ortega justicia por los fallecidos y elecciones adelantadas.
Entre los detenidos el sábado en la madrugada se encuentran dos sacerdotes que abrieron las puertas de su parroquia a los estudiantes de dos universidades que en 2018 fueron atacadas por el gobierno.
Monterrey es sacerdote de una parroquia aledaña a la extinta bautista Universidad Politécnica, confiscada por el gobierno.
Según tres fuentes de la Iglesia nicarag\u00fcense, el gobierno pidió que no mencionaran el nombre de Álvarez en las homilías y los detenidos se habrían negado aduciendo que como cristianos tenían que orar por los presos.
Reuters buscó una versión del gobierno nicarag\u00fcense y la policía, pero no obtuvo una respuesta a tiempo.