Reuters.- La muerte de una ciudadana estadounidense durante una protesta la semana pasada en la Cisjordania ocupada por Israel "no fue provocada, ni justificada" y demuestra que las fuerzas de seguridad israelíes deben hacer algunos cambios fundamentales en sus reglas de enfrentamiento, dijo el Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
"Nadie debería ser abatido a tiros por asistir a una protesta", dijo Blinken el lunes durante una conferencia de prensa en Londres, en los que fueron sus comentarios más duros hasta la fecha contra el Ejército israelí.
"A nuestro juicio, las fuerzas de seguridad israelíes deben realizar algunos cambios fundamentales en su forma de actuar en Cisjordania, incluidos cambios en sus normas de enfrentamiento", declaró.
Te podría interesar
El viernes, soldados israelíes mataron a una mujer turco-estadounidense que participaba en una protesta contra la expansión de los asentamientos en Cisjordania.
El Ministerio de Asuntos Exteriores turco dijo que Aysenur Ezgi Eygi recibió un disparo en la cabeza y culpó de su muerte al gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu.
Funcionarios palestinos la describieron como una activista de 26 años de Seattle que tenía ciudadanía estadounidense y turca.
El Ejército israelí dijo que sus tropas dispararon contra un "instigador principal" varón que suponía una amenaza porque lanzaba piedras contra los soldados.
El Ejército estaba investigando los informes según los cuales una ciudadana extranjera "murió como consecuencia de los disparos efectuados en la zona".
La oficina de Netanyahu no hizo comentarios inmediatos sobre el incidente.
Fouad Nafaa, director del hospital Rafidia de Nablus, dijo a Reuters que Eygi llegó allí en estado crítico, con una grave herida en la cabeza.
"Intentamos practicarle una operación de reanimación, pero desgraciadamente murió", dijo.
La agencia oficial de noticias de la Autoridad Palestina, WAFA, dijo que el incidente ocurrió durante una marcha de protesta regular de activistas en Beita, un pueblo cerca de Nablus que ha sido testigo de repetidos ataques de colonos judíos contra palestinos.
En un comunicado, Sean Savett, el vocero del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, dijo que Washington estaba "profundamente perturbado por la trágica muerte de un ciudadano estadounidense" en Cisjordania el viernes pasado.