EFE.- El aumento de la trata de personas en la frontera entre México y California, la más transitada en el hemisferio, preocupa a las autoridades de la región, que advierten que este flagelo de ganancias millonarias deja cada vez más víctimas, entre ellos, migrantes y refugiados.
Este delito ha estado ganando terreno en los dos lados de la frontera, dijeron este jueves las autoridades californianas y mexicanas, al igual que organizaciones no gubernamentales, que se reunieron en la ciudad de Chula Vista (California) para estrechar la colaboración en su lucha contra este flagelo.
Tan solo en el condado de San Diego, la trata de personas con fines de explotación sexual mueve 810 millones de dólares al año, según datos de la fiscalía.
“En promedio, las víctimas tienen 16 años, pero hemos rescatado de 12 años de edad que son explotadas y obligadas a tener relaciones con desconocidos por dinero”, dijo a EFE el investigador de la fiscalía de San Diego, Dave Owen.
Agregó que San Diego en particular es un sitio de alta demanda por su ubicación fronteriza. Más de 360 víctimas de trata de personas son rescatadas en ese condado al año.
Pero las autoridades estiman que muchas otras víctimas “siguen explotadas sin que aún se les encuentre”, dijo Owen.
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Un ejemplo de la dimensión del problema fue la operación encubierta en la que se arrestaron la semana pasada a 14 personas y se rescataron a 10 víctimas durante la última edición de Comic-Con Internacional, un evento que atrae a más de 100 mil fanáticos de los cómics y la cultura pop a San Diego cada año.
Los migrantes, en la mira de los traficantes
El flagelo ha golpeado de manera significativa a los migrantes y refugiado, según advirtió Roxana Kennedy, jefa de policía de la ciudad de Chula Vista, quien señaló que los traficantes abusan de “la vulnerabilidad” y el anhelo de los recién llegados por una mejor vida en Estados Unidos.
La jefa conoce bien el problema, porque su ciudad se ubica a sólo siete millas al norte del punto fronterizo más transitado en el mundo, una frontera que “no es sólo una línea en un mapa, es también una gran atracción para los traficantes de personas” para explotación, indicó.
Kennedy explicó que las víctimas que han encontrado en el área “son de todas las razas y de todas las edades”, lo que tienen en común es que son “víctimas por ganancias y por control”.
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Por su parte, la cónsul de México en San Diego, Alicia Kerber Palma, exhortó a desarrollar en ambos lados de la frontera acciones conjuntas y pidió colaboración del público. “ Si ven algo, digan algo”, enfatizó la diplomática.
La reunión binacional fue convocada por la Red Internacional de Corazones, una organización sin fines de lucro que desde hace más de 20 años busca frenar el tráfico de personas y la explotación en la región binacional.
La presidenta de la red, Alma Tucker, dijo a EFE que al ser una región tan dinámica y con tanto turismo es un terreno ideal para los explotadores. “En eventos masivos, como conciertos, en eventos deportivos, muchas veces estos criminales se filtran para convencer a niñas, a adolescentes, a mujeres, que muchas veces son sometidas a la fuerza”, ahondó.
Señaló que han identificado que “en las redes sociales es donde los criminales están por horas, por días buscando personas vulnerables”, especialmente menores de edad.
El encuentro, “Dos regiones, una frontera, sobre tráfico humano binacional”, sirvió para que miembros de organizaciones de los dos lados de la frontera conocieran a fondo las señales para identificar que un menor o una persona es víctima de trata y explotación.