EFE.- Una vigilia con música, rezos y llamadas a la acción se llevaron a cabo este miércoles para cerrar el aniversario de la matanza escolar en la escuela primaria Robb de Uvalde, que llevó a la muerte de 19 niños y 2 profesoras.
Tras una jornada de luto y homenajes, las familias de los fallecidos se reunieron esta noche en un acto público en un homenaje por las víctimas del tiroteo reportado hace un año, suceso que afectó profundamente al municipio de 15 mil habitantes, la mayoría de origen latino.
Te puede interesar: A un año del tiroteo en Uvalde, Biden recuerda a las 21 víctimas: "Nunca se irán de sus corazones"
Aunque principalmente se remitió al recuerdo y oración, varias voces pidieron cambios en las leyes de armas y recordaron la lucha que han llevado a cabo los padres de los menores fallecidos durante el último año.
Sin embargo, la lucha no ha tenido resultados, pues su principal demanda de elevar la edad para poder tener armas de asalto de los 18 años a los 21 años, no se ha convertido en ley.
Salvador Ramos, el tirador, tenía 18 años recién cumplidos y se había comprado por su cumpleaños el rifle automático AR-15 con el que disparó en contra de varias personas.
En la ceremonia celebrada junto al centro cívico de la localidad de Texas, participaron miembros de distintos colectivos, entre ellos dos jóvenes de la organización Newtown Action Alliance, que nació tras la matanza escolar en Sandy Hook de 2012, que dejó un saldo de 26 personas muertas, la mayoría niños de entre seis y siete años.
Recomendamos: Kamala Harris aboga por mayores restricciones en la venta de armas a un año de la matanza en Uvalde
“Estamos aquí por la conexión que tenemos con lo sucedido”, apuntaron Geneva Whorf y Molly Zatlukal, quienes confesaron estar tristes y enfadadas porque sigan produciéndose tiroteos en Estados Unidos.
“Demasiados miembros del gobierno y del Congreso han fallado en protegernos. No tenemos que vivir así y vamos a continuar usando nuestras voces para pedir a los políticos que alejen los AR-15 de la vida de los niños”, clamaron.
Tras liberar decenas de mariposas simbolizando a los 21 fallecidos, un grupo de supervivientes inició un encendido masivo de velas. Lo encabezaban los alumnos que estaban en las dos aulas donde Ramos se encerró, las ya famosas 111 y 112.
Antes de la vigilia, los familiares llevaron a cabo un paseo por los murales que se pintaron hace unos meses en varias paredes de la localidad, con los retratos de los niños.
Hay varias investigaciones abiertas sobre lo sucedido. Un informe de un comité de la Cámara de Representantes de Texas encontró que hubo “fallos sistémicos” en la respuesta policial.
La fiscalía del distrito está estudiando si se deben presentar cargos contra los oficiales que esperaron durante más de una hora para irrumpir en el salón de clases y neutralizar a Ramos. También hay abierta una investigación del Departamento de Justicia.