EFE.- Grupos defensores de los migrantes en Nueva York criticaron a la gobernadora demócrata Kathy Hochul por no incluir en su agenda de trabajo anual suficientes medidas específicas para ellos, incluyendo a los cerca de 30 mil solicitantes de asilo llegados en los últimos meses.
La New York Immigration Coalition (NYIC), que abarca unas 200 organizaciones en todo el estado, reconoció los compromisos de Hochul, del ala moderada del Partido Demócrata, en algunos asuntos importantes para los migrantes, pero resaltaron su falta de apoyo a legislación importante para esta comunidad.
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NYIC le pidió la aprobación de un proyecto de ley llamado “Acceso a la representación”, que daría derecho a un abogado de oficio a cualquier persona en Nueva York que enfrente la deportación, así como destinarle un presupuesto de 100 millones de dólares para evitar el riesgo de que las familias sean “cruelmente separadas”.
Asimismo, el grupo reclamó que Hochul se comprometa con otro proyecto llamado “Nueva York para todos” que prohibiría a las fuerzas del orden estatales y locales colaborar con la autoridad federal de migración (ICE) revelando información que puede conducir a deportaciones.
“Además, la falta de inversión en cobertura sanitaria para todos los neoyorquinos, independientemente de su estatus legal, no es un pequeño descuido a la luz de la actual pandemia y las contribuciones de nuestras comunidades a mantener Nueva York abierta a los negocios”, indica una nota.
Una de las organizaciones más grandes, Make The Road, con 25 mil miembros, también recordó que los migrantes han estado en la primera línea de la pandemia los últimos tres años y han sufrido especialmente la crisis de vivienda mientras se ven excluidos de prestaciones de desempleo o de cobertura sanitaria.
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“La gobernadora también debería apoyar el incremento de impuestos a los neoyorquinos más ricos para financiar viviendas, sanidad, educación (incluyendo educación para adultos) y necesidades de servicio legal vitales”, explica un comunicado de esta entidad.
Brad Lander, el auditor de la ciudad de Nueva York, que ha recibido a miles de migrantes enviados en autobuses desde el sur de Estados Unidos, se hizo eco también de esos reclamos, destacó la historia de migración de la urbe y dijo que el gobierno estatal debe destinar más fondos a dar cobijo y servicios a los recién llegados.