Gran Bretaña y Estados Unidos impusieron sanciones el viernes a hombres que dijeron eran agentes de los servicios de inteligencia rusos responsables del envenenamiento hace un año del líder opositor Alexei Navalny. Los dos países emitieron una declaración conjunta advirtiendo a Rusia sobre las armas químicas.
“El Reino Unido y los Estados Unidos de América reafirman nuestra condena del intento de asesinato del señor Navalny mediante el uso de un agente nervioso del grupo “Novichok“, una sustancia desarrollada por Rusia. Hacemos un llamado a Rusia para que cumpla plenamente con la Convención sobre Armas Químicas (CAQ), incluidas sus obligaciones de declarar y desmantelar su programa de armas químicas”, dice el comunicado.
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Ambos países sancionaron a siete personas, presuntamente relacionadas con el envenenamiento, mientras que Washington impuso por separado sanciones a otros dos hombres y cuatro instituciones rusas que, según dijo, estaban involucrados en la investigación de armas químicas y operativos involucrados en el envenenamiento de Navalny.
“El Reino Unido y los Estados Unidos se unen para tomar nuevas medidas contra las personas directamente responsables del envenenamiento del señor Navalny. Como hicimos después del uso de un arma química por parte de Rusia contra los Skripal en el Reino Unido en marzo de 2018, seguimos subrayando que debe haber responsabilidad y no impunidad para quienes usan armas químicas. Reiteramos nuestro interés en unas relaciones estables y predecibles con Rusia, sobre la base del pleno cumplimiento y aplicación de las obligaciones y compromisos internacionales”, dice el comunicado conjunto.
Por separado, el Departamento de Estado indicó que está imponiendo una segunda ronda de sanciones a Rusia en virtud de la Ley de Eliminación de Guerra y Control de Armas Químicas y Biológicas (Ley CBW). “Estos incluyen una restricción a la importación permanente de armas de fuego o municiones fabricadas o ubicadas en Rusia de conformidad con solicitudes de permisos nuevas o pendientes, así como restricciones adicionales sobre las exportaciones de tecnología nuclear y relacionada con misiles a Rusia”, dice en un comunicado.
Ned Price, portavoz del Departamento de Estado, dijo que “las acciones de hoy, ejercidas por los Departamentos de Estado, Tesoro, Justicia y Comercio de Estados Unidos envían una señal clara de que no habrá impunidad para el uso de armas químicas(…) cualquier uso de armas químicas es inaceptable y contraviene las normas internacionales. Estados Unidos pide a Rusia que cumpla con sus obligaciones en virtud de la Convención sobre Armas Químicas”.
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Price también demandó la liberación inmediata de Alexei Navalny durante una conferencia en la tarde del viernes. Horas antes, la canciller alemana, Angela Merkel también pidió la liberación del líder opositor en una reunión con el presidente ruso, Vladimir Putin, en Moscú.
El 20 de agosto del año pasado, Alexei Navalny fue envenenado en Siberia y luego trasladado a Alemania para recibir tratamiento médico, tras las pruebas, lo que los expertos médicos concluyeron que fue envenenado con el agente Novichok.
Rusia rechazó los señalamiento y a asegurado que se trata de una campaña de Occidente en su contra.