AP.- A partir de este lunes todos los maestros de la ciudad de Nueva York y otros miembros del personal escolar deben estar vacunados contra la Covid-19, luego de que entró en vigor el mandato al respecto que determina la obligatoriedad de la inoculación contra el coronavirus.

El alcalde Bill de Blasio dio un ultimátum a los aproximadamente 148 mil empleados de las escuelas públicas de la ciudad el viernes pasado, y se anticipó que los empleados no vacunados serían puestos en licencia sin goce de sueldo y no se les permitiría trabajar esta semana. La ciudad planea traer sustitutos de donde sea necesario.

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El mandato estimuló a muchos maestros a vacunarse a medida que se acercaba la fecha límite. El presidente de la Federación Unida de Maestros, Michael Mulgrew, dijo que el 97% de los miembros de su sindicato habían recibido al menos una dosis de vacuna hasta el lunes por la mañana.

Ejecutar el mandato sin problemas será una prueba para De Blasio, un demócrata que se ha jactado del historial de la ciudad de mantener abiertos los edificios escolares durante la mayor parte del último año escolar, cuando otros distritos pasaron a la instrucción totalmente remota. En Nueva York ya no tienen prevista la instrucción vía remota.

La orden de vacunación en el sistema escolar más grande del país no incluye una opción de prueba, pero permite exenciones médicas y religiosas. Se suponía que entraría en vigor la semana pasada, pero se retrasó cuando un tribunal federal de apelaciones otorgó una orden judicial temporal. Un panel de apelaciones revocó esa decisión tres días después.

Una orden de inoculación similar entrará en vigor en Los Ángeles el 15 de octubre.

Mark Cannizzaro, presidente del Consejo de Supervisores y Administradores Escolares, dijo que a pesar del aumento en las vacunas la semana pasada, algunos directores tenían dificultades para encontrar personal suficiente para reemplazar a los trabajadores no vacunados.

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‘”Si bien estamos agradecidos de que el porcentaje de personal vacunado haya aumentado en todo el sistema desde que se extendió la fecha límite, todavía hay demasiados líderes escolares que no han podido encontrar sustitutos calificados”, dijo Cannizzaro.

Un grupo de maestros y otros empleados escolares que habían presentado una demanda por el mandato de la vacuna solicitaron el jueves a la Corte Suprema de Estados Unidos una orden de emergencia que bloqueara su implementación. La solicitud fue denegada el viernes.

Muchos estudiantes y padres apoyan el decreto como la mejor manera de mantener abiertas las escuelas durante la pandemia.

”Es más seguro para nuestros hijos”, dijo Joyce Ramírez, de 28 años, quien tiene a sus tres hijos en una escuela primaria del Bronx.

Ramírez dijo que espera que el requisito disminuya las posibilidades de que los maestros contraigan el virus y provoque el cierre de aulas o escuelas.

Cody Miller, un estudiante de 15 años en una escuela secundaria en Manhattan, dijo que todos los maestros deberían vacunarse. “Creo que deberían”, dijo el adolescente, quien se vacunó tan pronto como se aprobó la inyección de Pfizer para personas de 12 años en adelante.

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Pero Mally Diroche, otra madre del Bronx, tenía sentimientos encontrados. ”Siento que esa es una decisión que deberían poder tomar por sí mismos”, dijo la madre de tres niños de entre 3 y 12 años. Diroche, de 29 años, dijo que siente que las mascarillas y otras precauciones pueden controlar la propagación del virus dentro escuelas.

Algunos educadores tienen reservas sobre el mandato, pero lo están cumpliendo.

Maurice Jones, de 46 años, miembro del personal de apoyo de una escuela secundaria de Manhattan, dijo que se vacunó hace meses, pero simpatiza con los compañeros de trabajo que no han recibido las vacunas. ”Si tienen que hacerse más pruebas, tienen que hacerse más pruebas”, dijo Jones, “no creo que deban perder su trabajo”.

Roxanne Rizzi, quien enseña tecnología en una escuela primaria en Queens, esperó hasta el viernes para recibir su primera vacuna contra el coronavirus. “Tuve que hacerlo por las finanzas de mi familia”, dijo.

Rizzi, de 55 años, se había resistido a la vacuna porque contrajo Covid-19 en noviembre y creía que la inmunidad natural la protegería, y dijo que continuaría protestando por el mandato.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EU, las personas deben vacunarse incluso si ya han sido infectadas por el virus. La agencia dice que las vacunas Covid-19 ofrecen una mejor protección que la inmunidad natural y ayudan a prevenir la infección nuevamente.