La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, indicó este miércoles que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sí puede aplicar la ley de Insurrección para desplegar tropas militares dentro del país y controlar los disturbios.

"El presidente tiene la única la autoridad para invocar la ley de Insurrección (Insurrection Act). Es una herramienta que está en su poder (…). Si la necesita, la usará. Pero en este momento, él confía en tener en las calles a la Guardia Nacional. Esto funciona con gran resultado en Washington y Minnesota", dijo McEnany desde la Casa Blanca.

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La declaración de McEnany surgió horas después de que Mark Esper, secretario de Defensa de Estados Unidos, aseguró estar en contra de usar al ejército para "calmar protestas" en el país tras la muerte del afroamericano George Floyd.

La portavoz de la Casa Blanca añadió que la postura del secretario Esper no perjudica, por ahora, su cargo en el Pentágono.

"Si el presidente pierde la confianza en el secretario Esper estoy segura que sería la primera en saberlo. Hasta este momento, el secretario Esper sigue siendo el secretario Esper. Y si el presidente pierde la fe, todos aprenderemos sobre eso en el futuro."

Retomando las protestas en el país, McEnany declaró que los ciudadanos no tienen ningún derecho para manifestarse violentamente en las calles. Sin embargo, sí pueden "reunirse pacíficamente".

“La Primera Enmienda [de la Constitución estadounidense] no le da derecho a nadie para hacer disturbios, para saquear, para incendiar edificios, para atacar a ciudadanos o policías.”