EFE.- El protagonista del documental de Netflix de 2020 "Tiger King", Joseph "Joe Exotic" Maldonado-Passage, que cumple prisión por varios delitos, dio a conocer a través de redes sociales que su esposo mexicano, Jorge Márquez Flores, a quien conoció en la cárcel, fue deportado tras una audiencia de migración.
De acuerdo con Maldonado, el mexicano, con quien se casó el pasado noviembre en una prisión en Texas, y que estaba detenido por presuntamente violar leyes de migración, fue llevado el viernes a una audiencia a un centro de detención del Servicio de Inmigración, tras la cual fue deportado, informó este lunes la revista People.
Maldonado publicó en X el fin de semana, que acompañó con una foto de la pareja, que se estaba comunicando con agentes de ICE y pidió al presidente Donald Trump una oportunidad para reunirse nuevamente con su esposo.
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"Jorge me dio los 10 meses más amorosos y dedicados de mi vida. Ruego a Dios que me dé la oportunidad de vivir con él de nuevo", indicó el domingo en X, donde además hay una foto del mexicano mostrando un tatuaje del rostro de Maldonado.
El mexicano, de 33 años, estaba en la prisión tras haber sido atrapado presuntamente conduciendo un vehículo con seis migrantes, según medios locales.
El protagonista de "Tiger King" publicó hoy que su marido fue dejado en la frontera y que mientras viajaba en un autobús a Monterrey, "un cártel se apoderó del autobús, le robó el dinero y el teléfono, y lo golpeó"
"No dejaré de pedirle al presidente Trump el indulto ni de apoyarlo. En algún momento deberá admitir que es hora de que le liberen", señaló además en su publicación.
Maldonado, de 63 años, anunció en octubre su compromiso con Márquez Flores y señaló además que gestionaba obtener asilo para él; de no lograrlo, tenían previsto dejar Estados Unidos "cuando salgamos de prisión".
El reo era dueño de un zoológico en Oklahoma y la serie trataba sobre su vida allí con los animales. Pero, en 2019, fue declarado culpable de 21 cargos, incluidos 19 por delitos contra la vida silvestre y dos cargos por contratar sujetos armados para matar a la activista de los animales, Carole Baskin, que había criticado el trato que su zoológico daba a los animales.