EFE.– Con un llamado a reformar las leyes sobre cinematografía en México y el predominio de películas dirigidas por mujeres fue realizada este sábado la edición 66 de los Premios Ariel que otorga la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) por segunda vez en Guadalajara.
"Tótem" fue la cinta con mayor número de premios al llevarse cinco de las 15 categorías a las que estaba nominada, entre ellas Mejor Película, Mejor Dirección y Mejor Guión original para la cineasta Lila Avilés, así como Revelación Actoral para la niña Naíma Sentíes y Mejor Coactuación femenina para Montserrat Marañón.
Marañón compartió el premio de Coactuación Femenina con Ludwika Paleta, por su rol en la cinta "Todo el silencio", la película obtuvo además los premios a Mejor Ópera prima para el director Diego del Río, Mejor Actriz para Adriana Llabrés y Mejor Sonido para Miguel Hernández, Mario Martínez Cobos y Liliana Villaseñor.
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"Temporada de huracanes", una de las favoritas de la ceremonia y dirigida por Elisa Miller, obtuvo tres de sus once nominaciones; Mejor edición para Miguel Schverdfinger y Paulina del Paso, Mejor Guión adaptado para Elisa Miller y Daniela Gómez, y Mejor Maquillaje para Alejandra Velarde.
Miller afirmó que adaptar el libro de la escritora mexicana Fernanda Melchor, considerado uno de los 100 mejores libros del siglo XXI por el New York Times, fue un reto por la complejidad de la historia.
"Para mí fue una reflexión de que adaptar se parece mucho a traducir y se parece mucho a seleccionar y curar y yo le he dicho a Fernanda Melchor que esta es una más de las traducciones que le han hecho a su novela”, expresó.
El premio a Mejor Actor fue para Noé Hernández por su interpretación en "Kokoloko", la Mejor Coactuación masculina fue para Fernando Cuautle, de la película "Heróico", mientras que la Mejor Fotografía fue para Ernesto Pardo por "El eco", película dirigida por Tatiana Huezo, que también ganó el galardón a Mejor Largometraje documental.
"La sociedad de la nieve" dirigida por J.A Bayona fue elegida como la Mejor Película Iberoamericana.
Angélica María, Briggite Broch y Busi Cortés fueron homenajeados
La actriz mexicana Angélica María recibió el Ariel de Oro por su trayectoria de 74 años en la actuación y la música, en las que empezó siendo una niña.
“Me hace sentir muy dichosa, muy apapachada. Este Ariel se lo dedico a mi hija, a mis nietos y a ese público que me ha acompañado más de 75 años, gracias a la Academia por este honor tan grande”, expresó.
También recibió el Ariel de Oro la diseñadora de producción Brigitte Broch, por su amplia trayectoria en filmes como "Babel", "21 gramos", "Sólo con tu pareja", "Abel" y "La invención de cronos" en las que trabajó con los directores mexicanos Guillermo del Toro, Alejandro González Iñárritu, Alfonso Cuarón y Diego Luna, entre muchos otros.
La familia de la cineasta, guionista y documentalista, Busi Cortés, recibió el Ariel de Oro póstumo por su trabajo en el cine mexicano que comenzó en la década de los 70.
La AMACC organiza los Premios Ariel, que en su edición 66 contó con 186 nominaciones que compitieron en 24 categorías distintas.
Actualizar la ley e incrementar recursos
Durante la ceremonia, realizada en el Teatro Degollado, el presidente de la AMACC, Armando Casas, pidió al gobierno mexicano revisar y actualizar la Ley Federal de cinematografía e incrementar los recursos destinados al cine y la cultura.
“Corresponde a la política pública proteger y fomentar la producción cultural y la creación artística y el acceso irrestricto a ellas por parte de la población (...) El fomento al cine debe considerarse una inversión y no un gasto”, expresó.
Recordó que el cine es “estratégico para esta nación” pues contribuye a crear en el país una “cultura de paz, tolerancia y diálogo” entre los diversos sectores de la sociedad, y reconoció la necesidad de que las pantallas sean un reflejo de la diversidad del país.
“Reconocemos la importancia que el cine tiene en la construcción en los imaginarios y nuestras identidades, en nuestro cine deben caber todas las diversidades, todas las voces y todas las culturas, queremos un cine plural e incluyente porque el cine es una de las más potentes expresiones culturales e identitarias de un país, de un proyecto de nación”, declaró.
Casas expresó la solidaridad de la industria cinematográfica mexicana con sus colegas de Argentina por el “embate de políticas gubernamentales que ponen en entredicho la viabilidad de una cinematografía emblemática y puntera en el cine iberoamericano”.