El PRI y el PAN condenaron el asesinato del alcalde con licencia de Pihuamo, Humberto Amezcua, quien buscaba su reelección, y exigieron que se investigue el hecho y se castigue a los responsables. 

El dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, acusó que este proceso electoral se está convirtiendo en el más violento de la historia “debido a la pésima estrategia del gobierno federal de abrazar a los criminales”.

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El panista urgió a regresar la paz y tranquilidad a México.

Por su parte, el PRI acusó que “Jalisco está sumido en una grave crisis de violencia y las autoridades estatales y federales se niegan a actuar”. 

A través de un comunicado, el presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno, expresó que el asesinato del alcalde “es una prueba más de la descomposición que vive nuestro país”.

Acusó que el crimen y la inseguridad cada día ganan más terreno mientras las autoridades no actúan.

El gobernador del estado de Jalisco, Enrique Alfaro, informó la madrugada de este sábado sobre el asesinato del alcalde Humberto Amezcua.

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A través de redes sociales, Enrique Alfaro aseguró que el asesinato parecía resultado de un ataque directo contra el funcionario y que por este hecho el Ministerio Público ya abrió una carpeta de investigación.

Indicó que la fiscalía va a ser la encargada de brindar información sobre el caso conforme se avance en las investigaciones.

Humberto Amezcua buscaba la reelección con la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco, que está integrada por los partidos PRI, PAN y PRD.