Los candidatos a la gubernatura de Nuevo León, Adrián de la Garza y Samuel García, utilizaron parte del segundo debate electoral para expresar su inconformidad con el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, al cual acusaron de intervenir en el proceso electoral.

Casi al inicio de su intervención, el candidato del PRI y el PRD aseguró: “Me enfrento al poder que me ataca desde Palacio Nacional”, en referencia a la investigación que abrió en su contra la Fiscalía General de la República (FGR) por supuestamente haber solicitado votos a cambio de una "tarjeta rosa", con la cual se puede obtener dinero si De la Garza se convierte en el próximo gobernador de Nuevo León.

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El de Movimiento Ciudadano también es investigado por la FGR por presuntos delitos electorales y por financiar su campaña con recursos de procedencia ilícita. La carpeta en su contra incluye también a su esposa, la influencer Mariana Rodríguez, así como a su papá y a su suegro.

“Vendrán muchas más mentiras, pero ganaremos el 6 de junio, porque ni el INE ni AMLO ni los tribunales nos robarán la elección”, dijo Samuel García casi al final del debate, organizado por la Comisión Estatal Electoral de Nuevo León.

Ante los cuestionamientos sobre si él era el candidato del presidente López Obrador, García negó que esa versión fuera cierta y aseguró que ha sido “el más duro crítico de Andrés Manuel”. Además, dijo que todos los ataques en su contra se deben a que va 15 puntos arriba en las encuestas. “Están así de desatados porque por fin va a llegar a la gubernatura un joven sin padrinos, sin corruptelas, sin comprar secretarías, sin mentir haciendo montajes”.

En tanto, la candidata de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena–PT–PVEM), Clara Luz Flores, mantuvo su postura respecto a García, al sostener que él es “el nuevo Bronco”.

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“(Samuel García) no aclara el dinero con el que financia su campaña. Su plan de gobierno es un catálogo de ocurrencias. Pero tampoco podemos volver al pasado de corrupción, impunidad e injusticias de los medinistas”, dijo la morenista, quien reveló que, antes del proceso electoral, la buscaron “todos los partidos políticos” para hacerla su candidata. “Pero al final tomé la decisión de estar en la única vía que garantizara que Nuevo León volviera a ser una potencia económica sin que nadie se quede atrás”.

García también destacó ese discurso de la grandeza económica y social del estado. Al inicio del debate, mencionó que Nuevo León es la entidad que más aporta al Producto Interno Bruto (PIB) e incluso habló sobre promover la “marca Monterrey“.

El candidato de Fuerza por México, Emilio Jacques, recordó que la deuda estatal asciende a 80 mil millones de pesos y destacó la importancia de establecer finanzas públicas sanas para hacer frente a la pandemia de Covid-19.

El abanderado del Partido Acción Nacional (PAN), Fernando Larrazábal, adoptó prácticamente la misma postura que en el primer debate: atacar a Adrián de la Garza y a Samuel García. Sobre el primero dijo que no tiene la capacidad para combatir la inseguridad provocada por el narcotráfico y puso como ejemplo su desempeño como procurador estatal, cargo que ocupó De la Garza de 2011 a 2015, cuando Rodrigo Medina era gobernador.

“Con (el ex gobernador) Rodrigo Medina fuimos saqueados”, aseguró. “Después, tuvimos un gobierno (el de Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco) que no ha dado los resultados esperados”.